Por si fuera poco, la también legisladora Pineda Andrade pidió al “Presidente” de la JUCOPO, no actuar de forma misógina, pues, visiblemente engallado de manera soberbia y prepotente el legislador local por Los Tuxtlas intentó callar a las diputadas en sus intervenciones durante las comparecencias.
Ahí mismo en la Legislatura se ha evidenciado la falta de oficio político, el poco tacto y sensibilidad de las que carece el imprudente naco que le hizo referencia a lo monarquía en la imagen del peor enemigo de los morenistas Miguel Ángel Yunes Linares y que a la postre le ganó una reverenda “madrina” en las redes sociales y decenas de medios de comunicación a nivel nacional y estatal.
Alguien tendrá que decirle a “El carón” y “monje moco” que llegó al Congreso gracias a la inercia de Morena y al efecto peje y que por el contrario Maryjose Gamboa fue reelegida con votos duros y directos, sufragios de carne y hueso, lo cual marca una abismal diferencia.
Otro tema que él mismo y su gente de “confianza” exhibió en las redes sociales fue la intromisión de quien será el jefe de las instituciones en Veracruz, evidenció que el poder Ejecutivo estará por encima del legislativo, pues para eso lo “enchufó” a huevo como Presidente de la Junta de Coordinación Política en el Congreso del Estado, anteponiendo las instrucciones de quien será el mero preciso a nivel nacional a partir del primero de diciembre y para demostrar que son muy “cuadernos” Gómez Cazarín y García Jiménez, ahí mismo en su cubículo se repartieron el jugoso pastel de tres leches, sííí el pastel que simboliza los 700 millones de pesos que manejará a su libre albedrío, quien también pretende obtener la mayoría de las diversas obras públicas de todos los ayuntamientos.
Con lo que no contaba el perverso “monje moco” es que el superdelegado de todos los programas federales en Veracruz, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, será su calzador y permanente vigilante para que no se quiera pasar de vivo con los alcaldes, al grado de chantajearlos y coaccionarlos, tal y como ocurre con Jorge Alberto Quinto Zamorano, sí , ahí mismo en su terruño de Hueyapan de Ocampo, donde por cierto todo el pueblo sabe que hizo malas obras en la administración de Lorenzo Velázquez Reyes.
En la próxima entrega detallaremos los alardes y cochupos del personaje en alusión que simboliza “la mafia del pinche poder” y por la cual el pueblo verdaderamente hastiado aplastó en las urnas a los candidatos del PAN, PRI, PRD y otros partidos, que lástima que lo expresado por Juan Carlos Molina Palacios, al referirse al castigo del pueblo a su Instituto político le haya entrado por un oído y le haya salido por el otro al flamante legislador neófito Gómez Cazarín.
En Santiago Tuxtla los ánimos están caldeados entre los grupos que apoyan y respaldan al alcalde y ediles y los que están involucrados en la propuesta de derrocamiento del Ayuntamiento, un tema que raya en lo inconcebible porque se está perjudicando gravemente a terceras personas, por lo que urge que se restablezca el orden y el respeto a las instituciones.
A todas luces resulta ya inadmisible la postura malsana de unos cuantos que tienen en su poder, desde hace más de un mes, las instalaciones del palacio municipal donde se albergan diversas dependencias del orden público administrativo relacionadas con la funcionalidad y operatividad del Ayuntamiento, perjudicando y desestabilizando política, económica y socialmente a miles de habitantes del municipio de Santiago Tuxtla.
A estas alturas los protagonistas de estos hechos lejos de ganar adeptos se están agenciando a pulso el repudio de la sociedad en cada rincón del municipio y más aún porque ya saben quiénes son los entes de la clase política que están manipulando el movimiento bajo las siglas de Morena, son los mismos que ya estuvieron en el poder municipal y dejaron muy malos antecedentes administrativos.
La desestabilidad política, social, económica y administrativa en este lugar podría atrapar al próximo Gobernador del Estado Cuitláhuac García Jiménez, pues sigue tomado el Palacio municipal y los manifestantes, arropados en las siglas del partido Morena, pretenden el derrocamiento de los poderes, pero a decir de los expertos en materia legal no hay ninguna causa grave como para que renuncia el alcalde Argeniz Vázquez Copete y los demás ediles, no hay lugar, no procede, simple y llanamente porque no hay elementos que pudiera dar pauta para lo que piden los manifestantes.
Estos nubarrones de tormenta deberán ser atendidos a la mayor brevedad posible antes de que sea demasiado tarde, ya que ha trascendido que un considerable grupo de ciudadanos pretenden por la fuerza ir a rescatar la casa del pueblo, por fortuna el propio alcalde los ha exhortado a la calma en espera de que las instancias gubernamentales hagan valer la Ley.
Y cuánta razón tiene el abogado y columnista Isidro Jiménez, al referirse a este grave problema cuando textualmente cita…
“Lo ha dicho el propio Andrés Manuel López Obrador, nada por encima de la Ley y en este caso ya se está trastocando el estado de Derecho al impedir que en Palacio se puedan reanudar las labores cotidianas con el grave perjuicio para la ciudadanía, el límite y la tolerancia está llegando a su fin, es momento de aplicar la ley y fincar responsabilidades, sea quien sea el responsable directo o indirecto, intelectual o material, éste movimiento ya no tiene razón de ser, mientras los principales cabecillas duermen a pierna suelta, diez o quince personas a sueldo resguardan el palacio esperando alguna confrontación de la contraparte, cosa que no se vale, es hora de hacer un recuento de los daños, ¿qué cuentas entregarán los protagonistas de la toma del Palacio al nuevo gobernador Cuitláhuac García Jiménez?, de no entrar en razón es casi seguro que la mano implacable de la Ley le estará haciendo justicia a los Santiagueños”. Más claro ni el agua. |