Conocedores de las señales y luego de que 10 de 14 pretendientes a la dirigencia estatal del PRI renunciaran a sus aspiraciones, pues observaron que los dados estaban cargados para Ramírez Marín, todo indica que el “TUCOM” (Todos Unidos Contra Marlon) estará afincándose en serio con miras a la renovación de este instituto político.
Y es que aún y con la aparente intromisión del ex diputado federal Jorge Carvallo Delfín, del silencio indicativo de Lilian Zepahua, o de la presunta operación de Zeferino Tejeda Uscanga a quién le corresponde nombrar a los delegados distritales para elegir y/o adoctrinar a los funcionarios de casillas y hasta operar el proceso, estos consensos a favor en contra estarían dando frutos si todos terminan por coordinarse.
Se tiene que decir, de una u otra manera el proceso interno del Revolucionario Institucional estará plagado de irregularidades, y nadie quedará contento.
La neta.
Sin embargo, ya se verá si funcionan o no los planes afines a Marlón quién está apoyado por una buena elite partidista, o si finalmente sus malquerientes como Ramírez Arana, Damara Gómez, Carolina Gudiño Corro, Fabiola Balmori, Belem Palmeros, Sheila Flores, Raúl Zarrabal, Nino Bazzi, y un largo etcétera finalmente cierran filas para cambiar la tortilla.
Ya veremos qué es lo que pasa.
POR CIERTO, gran verdad fue la que declaró el dirigente estatal del PRD Jesús Alberto Velázquez Flores, al señalar que en “Veracruz aparte de ser honesto se requiere un gobernador capaz para resolver la situación de inseguridad”.
Y vaya que lo dijo bien, pues el presidente Andrés Manuel López Obrador debe de entender que las y los veracruzanos más que elogios para su mandatario, necesitan resultados y un gobernante eficaz que sepa resolver los problemas de la entidad.
¿Estará Cuitláhuac a la altura de las circunstancias?
Ya se verá.
@IvanKalderon |