La reforma que impulsa el gobierno federal adiciona y deroga diversas disposiciones de los artículos 3, 31 y 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia educativa. Elimina la evaluación punitiva a los maestros y ña convierte en formativa, plantea que la educación superior sea obligatoria, desaparece el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE) para crear un instituto nacional de mejora continua y modifica derechos laborales para los profesores, entre los que brinda libertad y democracia a los sindicatos magisteriales.
El congreso local de Veracruz aprobó la reforma con el voto en contra de la bancada del PAN, pero a favor de los diputados de las bancadas de Morena, PRI-PVEM, Del Lado Correcto de la Historia y MC-PRD.
Durante la aprobación, los legisladores panistas se distinguieron porque se ausentaron del recinto legislativo. Acción que ya se ha hecho costumbre y que realizan cuando no les gusta que no se haga su voluntad, como este martes en que las demás bancadas legislativas se mostraran a favor, en lo general y lo particular, de la minuta con proyecto de decreto enviada por el Congreso de la Unión. Durante el debate que se dio, los únicos inconformes con la reforma fueron los diputados panistas, pues señalaron que no se estudió a fondo las consecuencias en el estado.
Contra el argumento de los panistas, la mayoría de los legisladores veracruzanos aplaudieron la aprobación de la minuta con proyecto de decreto y reconocieron que garantizará los derechos laborales de los maestros, así como la calidad educativa de todos los estudiantes.
En la sesión, los diputados recriminaron en sus pronunciamientos que la anterior reforma ponía en práctica un mecanismo de evaluación y sanciones punitivas ocasionando el desequilibrio y la inequidad dentro del magisterio así como la inestabilidad del sistema educativo, afectando principalmente a los estudiantes.
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