El llamado de atención fue general, para todos los servidores públicos, adheridos a las filas de Morena: “No metan las manos en los procesos internos de su partido. A quien se le sorprenda haciendo lo propio, será cesado”.
La mañana de este martes, durante su conferencia de prensa, el presidente Andrés Manuel López Obrador se refirió ampliamente a ese tema y admitió que “persisten algunas inercias” de gobiernos anteriores, en los que el Presidente decidía lo que se hacía en su partido. Él asegura que con Morena no pasará lo mismo:
- Ahora decimos: no debe de confundirse, una cosa es el partido y otra cosa es el gobierno, y no hay partido de Estado. Hoy tengo precisamente una reunión con los coordinadores de los programas sociales en todo el país y el tema central es ese: No se metan. El que participe favoreciendo a candidatos, a partidos, el que se meta en los procesos electorales internos de los partidos, como lo que está ahora llevándose a cabo en Morena, el funcionario que se meta a eso, lo primero es separarlo del cargo, pedirle su renuncia de inmediato y ponerlo a disposición de la Fiscalía Electoral. Entonces, hay algunos que les cuesta trabajo entender esto.
López Obrador tuvo que salir a “pintar su raya” porque le llegaron quejas de los más diversos puntos del país, señalamientos que son una prolongación de lo que se dijo semanas antes, cuando era inminente la elección de la nueva dirigencia nacional de ese partido, o la reelección de Yeidckol Polevnsky.
Desde entonces ya se hablaba de la intromisión de Gabriel García, coordinador de Programas Integrales de Desarrollo en el gobierno federal, y que en realidad es el jefe de los llamados “super delegados”.
Este problema, que se ha presentado en todo el país, tiene también su manifestación en territorio veracruzano y, al margen del ruido mediático que algunos actores secundarios han provocado, lo cierto es que se trata de una medición de fuerzas entre el “super delegado” Manuel Huerta, y el secretario de Gobierno, Éric Cisneros.
Legisladores locales y federales claramente vinculados con Manuel Huerta son los que han encabezado la ofensiva mediática en contra del funcionario estatal y de aquellos diputados a los que identifican como sus aliados.
Curiosamente los señalamientos en Veracruz van en el sentido de que se están utilizando los programas sociales para influir en la selección de delegados de Morena, pero se refieren, específicamente, a los programas que se operan desde oficinas del gobierno estatal, como la Sedesol.
Los “huertistas” le apuestan a seguro: a que, caliente como es, Éric Cisneros habrá de comprar el pleito y se meterá en un debate que lo habrá de desgastar, en tanto que el “super delegado” se mantiene al margen, reportando al centro las incidencias, pero supuestamente ajeno a esos malos manejos.
Y el problema no es que Éric Cisneros se enganche en un pleito que nada positivo le deja, sino que esté embarcanbdo en él al propio gobernador, Cuitláhuac García, quien tuvo que salir a defenderlo y a pedir a quienes señalan al secretario de Gobierno, que respalden sus dichos con pruebas.
Las palabras de Andrés Manuel Lóoez Obrador no dejan lugar a dudas:
- Los funcionarios del gobierno no tienen por qué meterse en nada. Y yo aprovecho (…) para decirle a los militantes de Morena que siempre hemos luchado, siempre se luchó por no permitir la intervención del gobierno y que siempre hemos luchado por la democracia(...) Porque algunos también pensaron que iba ser sólo discurso y que luego iba a terminar en lo mismo. No. Imagínense, ¿qué caso tiene llegar a aquí para hacer lo mismo?, no tiene ningún sentido. Si está uno aquí es para que haya cambios, transformación.
¿Me entiendes Manuel, o te explico Éric?
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Epílogo.
Se escuchaba en los pasillos de Palacio Legislativo, pero nadie lo había querido mencionar. Hoy ya parece una realidad: En el próximo período ordinario de sesiones se modificará la Mesa Directiva del Congreso local y es muy probable que José Manuel Pozos deje la Presidencia, para que quede a cargo de una mujer. *** El pasado lunes el legislador de Morena Magdaleno Rosales reconoció ante los medios de comunicación que analizan perfiles para sustituir a José Manuel Pozos Castro de la Presidencia. Curiosamente el legislador expresó su consentimiento para que Juan Javier Gómez Cazarín se mantenga como coordinador de la bancada de Morena, pero sí destacó la necesidad de modificar la integración de la Mesa Directiva: “Mi voto sería para que el diputado Juan Javier Gómez Cazarín siga al frente de la Jucopo, pero en la Mesa Directiva es otro asunto. Sería sano que una mujer sea la presidenta”.
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