No se podía esperar otra cosa. Actuó como todo político, suponiendo que lo es, de cualquier partido. Todo lo ve color de rosa. Él vive su realidad, muy distinta a la de los veracruzanos que no gozan de ningún privilegio como el que da el poder político.
Me atengo al boletín oficial sobre su comparecencia.
Dijo, por ejemplo, que no hay ineficiencia ni improvisación en el gobierno al que pertenece. Cualquier trabajador con muchos años en el servicio público lo desmiente.
Dijo más: que hoy se viven mejores condiciones de seguridad. Cualquier veracruzano sabe que no es cierto.
Por lo que se advierte, y es preocupante por el nivel de su cargo, no ve los ríos de sangre y las montañas de cadáveres que cubren Veracruz y si no acepta que está enfermo entonces tampoco aceptará la recomendación del médico para su cura.
En realidad no hay mucho qué decir sobre su comparecencia. No solo faltó la autocrítica sino que también desaprovechó la oportunidad para ofrecer a los veracruzanos una disculpa pública por los pobres resultados entregados hasta ahora.
Lamentable que la nota la haya dado un tema menor ante los grandes y graves problemas del Estado: su coautoría en un libro que, ¡agárrense amigos escritores de veras!, va a dejar una ganancia de ¡un millón de pesos! Eso no era lo de fondo.
Si ese fue el nivel que mostró en su comparecencia el segundo de a bordo en la estructura del poder, qué se puede esperar de las que siguen y faltan.
Bueno, habría que reconocer que ha habido un cambio en don Eric Patrocinio: se advierte que ya endureció la piel y que además se la cubre de aceite, del grueso, como el de ricino, pues todo se le escurre. Cliente preferente de las críticas en las redes sociales, lució una sonrisa de ni los veo ni los oigo. No cabe duda, vive en la burbuja del poder.
Crearían la Secretaría de Cultura
Dada la riqueza cultural del Estado, me llamó la atención un anuncio que hizo el gobernador Cuitláhuac García Jiménez en su mensaje del sábado pasado con motivo de su Primer Informe de Gobierno: que se creará la Secretaría de Cultura.
El anuncio se perdió entre otros temas. No dio fecha para cuándo ni ofreció detalles, pero es alentador que por fin un gobierno preste atención a un tema en el que el Estado destaca lo mismo en la entidad que el país y en el extranjero.
En este espacio recién me ocupé del trabajo aprobatorio que está llevando a cabo el Instituto Veracruzano de la Cultura (IVEC) bajo la titularidad de Silvia Alejandre Prado, la única dependencia que por resultados tiene un mil por ciento de productividad.
Recuerdo que cuando Veracruz, Xalapa, fue sede (por muy corto tiempo, lamentablemente) del Hay Festival, la prensa internacional puso a la capital del Estado en el escenario del mundo de la cultura, y en el extranjero se siguió hablando de la violencia pero también se empezó a dar una imagen positiva ante la presencia de personajes de diversas disciplinas.
No se debe olvidar que la franquicia se perdió ante el desastroso gobierno de Javier Duarte; se le quitó a Veracruz en protesta por lo que estaba pasando.
Otra mujer hace buen papel
Comenté en “Prosa aprisa” que a Silvia Alejandre Prado no la conozco en persona pero sí por sus resultados, que en tratándose de alguien que tiene una función pública es lo más importante.
Tampoco conozco a Ariadna Selene Aguilar Amaya, la oficial mayor de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), pero me dan las mejores referencias de ella y me han comentado un caso que la muestra como una servidora pública de resultados: la reciente basificación de más de 10 mil docentes y trabajadores administrativos, cifra que se espera que a fin de mes llegue a 25 mil.
En un acto que tuvo lugar el martes de la semana pasada en lo que fue el Museo Interactivo de Xalapa, el propio gobernador Cuitláhuac García Jiménez, con sus palabras dimensionó lo que considero que es el mayor logro hasta ahora de su gobierno.
“Cuando la oficial mayor me comunicó, tenemos concluidos los miles, sí me asombró el número, cuando te dicen son siete mil docentes, tres mil y tantos trabajadores administrativos, además se regularizan tantas plazas para una pronta basificación…”, dijo que se había quedado sorprendido.
Los beneficiados, muchos de ellos con bastantes años de antigüedad, comentan que llevaban muchos años esperando ese acto de justicia para ellos. Y cuál es el mérito de Ariadna Selene: que se fue a la Ciudad de México a cabildear, aprovechando su buena relación con el secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma, y cuando regresó traía ya el resultado.
Mujeres, pues (claro, hay de mujeres a mujeres funcionarias), son las que están dando la buena nota del gobierno cuitlahuista y tiene que reconocérseles.
Marlon bien, como opositor
El lunes de la semana que está por terminar el dirigente estatal del PRI, Marlon Ramírez Marín, se asumió bien en el papel que como oposición le toca jugar: salió a dar un “Informe de Mentiras” para contradecir el Primer Informe del gobernador Cuitláhuac García.
Con cifras en lugar de descalificativos, como marca la civilidad política que debe de actuarse cuando se es profesional, se refirió al subejercicio de recursos que hay lo que, mencionó, se refleja en la falta de obra pública.
Dijo que con base en información del propio gobierno, del CONEVAL, del INEGI y de otras fuentes podía señalar que de los 5,706.5 millones de pesos destinados para la inversión pública solo se han ejercido 1,038.4 millones, por lo que hay un subejercicio de 4,670.1 millones, lo que representa un 81.8 por ciento.
Y así, siguió dando cifras en todos los rubros, datos duros que hablan de subejercicios en otras áreas, información que si los diputados quisieran podría servirles para cuestionar a los funcionarios que van a comparecer y exigirles explicaciones.
Ante la falta del contrapeso que debiera representar la diputación local, es sano para la vida pública del Estado que un dirigente político cumpla ese papel, pero que además lo haga con conocimiento de causa. |