Salvo algunos incidentes aislados y reprobados por las propias mujeres que se manifestaban en la CDMX que ameritaron incluso la intervención de la autoridad.
Las crónicas marcan la participación de millones de mujeres en todo el país. Eran ríos y ríos de una indignación justificada. De un hartazgo de la impunidad con la que se ha tratado el feminicidio en el país.
Impresionante la columna morada que se formó desde el Monumento de la Revolución hasta el Zócalo de la capital que no dejó de tener hechos violentos que dejó como resultado 18 mujeres policías lesionadas, de las cuales tres fueron canalizadas a un hospital reportó la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX. Además, la Fiscalía General de Justicia de la CDMX reportó la detención de 6 hombres, entre ellos un menor de edad, por su probable responsabilidad en delitos cometidos en agravio de mujeres durante la marcha.
En las primeras planas de los medios se destacan las leyendas con los reclamos: ‘Una somos todas’ ‘En México nos están matando’ ‘Ni una más’ ‘Las mujeres indígenas también somos agredidas’ ‘No más al feminicidio y al machismo’ ‘Ni un feminicidio más’ ‘¡Basta de impunidad’ ‘Vivas nos queremos’ ‘Vivas y libres’ ‘Si algún día soy yo, quiero ser la última’
Y pues todo quedó puesto para que hoy México se pase el día sin mujeres, en el que se deberá reflexionar qué es lo que se debe hacer en el país machista repleto de impunidad en que vivimos, toda vez que ayer precisamente en el día internacional de la mujer y las muestras de un hartazgo general de hombres y mujeres para terminar con el feminicidio tres mujeres fueron asesinadas una en Salamanca, Guanajuato, otra en el Estado de Coahuila y una más en Tlalpan de la CDMX que obliga al Estado –Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial- deberá aplicar con mayor dureza la ley en contra el feminicidio o de lo contrario las marchas serán para exigir la renuncia de los irresponsables servidores públicos.
En realidad ayer las mujeres salieron a las calles, pero no están solas, también hay millones de varones bien nacidos que conocen y valoran el papel de la mujer en la sociedad y la familia que están reprobando por igual el feminicidio y la impunidad que se vive en el país.
O se entiende por la buena o por la mala. No hay de otra. No más abrazos.
¡Ya basta!
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