ACUDE AL CONGRESO DE VERACRUZ PARA SU ENTREVISTA PARA FISCAL. Con el respaldo de muy buenas números al frente de la Fiscalía General del Estado de Veracruz y de las principales organizaciones empresariales y académicos, Verónica Hernández Giadáns asistió esta mañana al Congreso del Estado para la entrevista personal conforme lo establece la Convocatoria para todos aquellos que aspiran convertirse en el nuevo Fiscal General del Estado de Veracruz. Verónica, hasta donde se sabe, cuenta con todos los requisitos necesarios para convertirse en la primera mujer que llegue al cargo de Fiscal General de Veracruz. Cuanta con la aprobación del examen de control y la confianza de las principales organizaciones empresariales y grupos académicos. Se sabe que Verónica basó su presentación ante la Comisión Legislativa de Procuración de Justicia que preside el diputado José Manuel Pozos Castro con la premisa de que “al margen de la ley, nada; por encima de la ley, nadie”. La encargada de despacho de la Fiscalía fue entrevistada directamente por los dirigentes de todas fuerzas políticas representadas en el Congreso, órgano que se le conoce como coloquialmente como la JUCOPO. Ésta, como se sabe, es una aduana muy difícil sobre todo porque la mayoría de los partidos de oposición a Morena están calientes por el ‘moche’ que se les hizo a sus prerrogativas económicas, pero ¿Qué le podrían objetar a Verónica en 8 meses? Tiempo demasiado corto para poner orden en una dependencia que adolecía de respeto y mano dura para enfrentar uno de los principales problemas de Veracruz como la impunidad que incentiva a la delincuencia a cometer más delitos. Veracruz lo que necesitaba era eficiencia y eficacia y si Verónica lo ha hecho así, ¿Para qué experimentar y enfrentar de nuevo otra curva de aprendizaje que mucho le podría costar a Veracruz? Veracruz necesitaba y necesita RESULTADOS y Verónica en ese rumbo va. Por ello no son pocos que sin miras cortas partidistas opinan que debe seguir al frente de tan importante dependencia.
EL SECTOR SALUD NO TODO SOLUCIÓN PARA TODO. ¡Ah! Pero para todo tiene justificación. Cheque estos 5 casos si no lo cree: 1.- En días pasados se dio a conocer el caso de un joven médico de Tamaulipas que se quejó en redes sociales porque llevaba ocho horas continuas dándole respiración mecánica a una paciente. Pedía, amablemente, que les dotaran en su hospital de ventiladores automatizados pues era inoperante lo que tenían que hacer. ¿La respuesta del IMSS? Que el joven médico era un mentiroso y que de comprobarse que actuó de mala fe, le impondrían severas sanciones. 2.- En días pasados es vieron imágenes en los medios de comunicación de familias enteras que tenían que pernoctar en los camellones afuera de los hospitales porque querían estar allí para cuando les dieran informes de sus familiares, cosa que les estaba costando mucho conseguir. ¿La respuesta de la SSA? Que en esos hospitales había áreas destinadas a los familiares y que no sabían qué hacían allí afuera y que, incluso, la información de los pacientes es fluida. 3.- En innumerables ocasiones se han visto quejas de médicos y enfermeras que se quejan de que les hace falta material de calidad y suficiente para enfrentar al COVID-19, e incluso han hecho plantones y hasta han presentado amparos para no presentarse a laborar sin las condiciones propicias. ¿La respuesta de López-Gatell y de la SSA? Que a todos los Estados y a los hospitales ya les fue enviado el material y equipo suficiente y que si no tienen “hay que revisar el caso específico”, pero que de que tienen… tienen. 4.- No son pocos los reportajes de personas enfermas de COVID que tienen que peregrinar de hospital en hospital (algunos hasta a 5 hospitales diferentes) para que los puedan recibir (sobre todo en la CDMX) y no los reciben porque ya no hay cupo. ¿La respuesta del Sector Salud? La ocupación hospitalaria es del 39% por lo que hay un 61% de disponibilidad. 5.- Todos los días hay reportes de gente saliendo a las calles, haciendo fiestas y reuniones, jugando en las calles y haciendo filas para comprar cosas innecesarias. ¿La respuesta del Sector Salud? Se ha logrado bajar la movilidad en un 65% y el pueblo bueno ha hecho caso, por lo que gracias a eso es ha domado al coronavirus y se llegó al pico el pasado 8 de mayo… ¡Vaya! Que no hay caso ni queja que no tenga explicación y en todos los casos la constante es que el Sector Salud toooooodo lo hace bien y que los mentirosos son los que se quejan. Sin embargo, a fuerza de repetirlo no necesariamente se hace verdad.
LA CANCELACIÓN DE OBRAS PEÑISTAS CONVERTIRÁ A AMLO en justo y legal, o en mentiroso y cómplice. Los sabios bebedores de café nos comentan desde su confinamiento voluntario que hasta ahora los argumentos en pro y en contra con respecto a la cancelación de obras millonarias que dejó pendientes de terminar el ex presidente Enrique Peña Nieto, no dejan de tener razón de parte y parte. Desde luego, partiendo de las premisas económicas de racionalidad y políticas en cuanto a la relación del Estado y el Capital. Es decir, no les asiste toda la razón ni todo lo malo, sin importar lo que argumenten los apasionados ‘Amloístas’ por un lado, ni lo que argumenten por el otro los quejosos inversionistas que perdieron sus jugosos negocios proyectados, sino desde el punto de vista de la razón, la justicia, la transparencia y la rendición de cuentas. La deuda de AMLO con los mexicanos en general es enorme y cada día crece más y más. Si AMLO no sanciona a todos aquellos que participaron en una obra como el Aeropuerto Internacional de la CDMX que él mismo ha calificado como fraudulenta y gangrenada de corrupción, entonces él mismo se convierte en cómplice. Pero además, no llevar al menos a juicio a esos ex funcionarios encargados directa o indirectamente de la obra, lo va convirtiendo día a día en un mentiroso e irresponsable violador de la ley, por conocer de un delito y no denunciarlo formalmente. La deuda es grande, pero de no haber castigos el peor daño a México no lo habrá hecho Enrique Peña Nieto sino Andrés Manuel López Obrador. Perdonar a los irresponsables de esas obras fraudulentas podrían convertir a AMLO en cómplice, mentiroso o corresponsable. Los canillazos para los que no pueden ver más allá de sus propios intereses partidistas.
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