Cada vez que en el gris edificio de Lázaro Cárdenas se avecina algún movimiento, ya sea por cambio de presidencia o por apertura de vacantes en las salas, los togados se comportan como una versión de los monges de Umberto Eco, que protagonizan ese glorioso libro “En el nombre de la rosa”, claro con que los magistrados del Poder Judicial Veracruzano, salvo honrosas excepciones; se comportan bastantito más corrientones, ¡No se le puede pedir peras al olmo!. 

Les cuento que hace un par de semanas, el magistrado Edel Álvarez Peña al cumplir 10 años, hizo saber que no buscaría la prorroga esa de 5 años, a la que podría acceder por ley; don Edel con el panorama muy claro, supo que estos son los tiempos de doña Chofi y mejor salir por la puerta de grande; mientras que los magistrados Gladys Pérez Maldonado y Fernando Charleston, quienes también cumplieron 10 años en sus respectivas salas, en un principio consideraron aspirar a permanecer por 5 años más, sin embargo Sofía Martínez, con ese sello suyo tan personal, les hizo saber que eso no sería posible, que mejor recogieran sus bártulos y dijeran adiós, así lo hicieron.

Un caso muy diferente fue el del magistrado Víctor Manuel César Rincón, quien también cumplió 10 años al frente de su sala, se supo que en un principio que el togado se quedaría por 5 años más, debido a que aunque estos son otros tiempos dentro del Poder Judicial, César Rincón es de los tiempos y las confianzas de la presidenta Martínez Huerta; lástima que alguien por ahí le abrió una Caja de Pandora de la que salió harto cochambre y ese cochambre fue publicado hasta en medios nacionales; así que no tan dignamente, porque le han puesto una balconada de Padre y Señor mío al togado, pero mejor optó por retirarse; así que hay 4 vacantes, además de las dos que dejarían Roberto Dorantes y Marco Antonio Lezama Moo, quienes al haber llegado a las 70 primaveras, pasarán a mejor vida, porque ese jugosa pensión y sin andar metido en los embrollos del Poder Judicial, ya quisiéramos muchos esa buena vida; cabe aclarar que este acuerdo, ya fue aprobado por el Pleno de la LXV Legislatura del Estado de Veracruz.

Ahora toca a la Soberanía iniciar de manera oficiosa, el procedimiento contemplado en el artículo 205 de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado, con el fin de cumplir lo exigido por la Constitución Política Local, que es exhortar al titular del Poder Ejecutivo, a cumplir acatando lo dispuesto e iniciar el procedimiento de nombramiento de los magistrados; es decir que ahora toca al señor gobernador don Cuitláhuac mandar las 6 propuestas para ocupar las magistraturas que quedarán vacantes. 

Ojalá y don Cuitláhuac volteara a ver a la academia, como dijo hace unos días el doctor José Luis Cuevas Gayoso, ya que luego del César-Rincón Gate, quedaron bastante expuestos, en la arrastriza mediática que le dieron al pobre hombre, lo hicieron quedar como uno de esos “Coyotes” que pululaban afuera de los juzgados del desaparecido Penal de Allende en Veracruz, más abajo de eso imposible. 

Cosas de la vida y menudencias 

Ayer tuve la necesidad de salir, debido a necesidades propias de la cuarentena, o sea a abastecerme de víveres para mi prole, ¡No bueno!, las calles están atascadas, los centros comerciales ni se diga, no pareciera que la gente está muriendo; lo lamento profundamente, porque hay muchos médicos muy cerca de mi corazón y se la carga laboral y el riesgo que implica la atención de enfermos Covid-19, que pena que pese a todo lo que hemos padecido y estamos sufriendo, aún no lleguemos a un buen nivel de conciencia.

Celebro de manera muy entusiasta a esa buena alma, quien quiera que sea, que se apiadó de los vecinos del Teatro del Estado, ya que justo ahora le están dando una buena shaineada a las calles Ángel Garrido y 10 de Mayo, son esas calles que están atrás del Teatro; hay maquinaria con  material, trabajadores  y toda la cosa, francamente tenían más de 15 años destruías, no sé si fue el Gobierno Estatal o el Municipal, pero ¡Gracias!, ya era hora. 

En fin queridos míos, “Morir es el destino de todos”, dijo Jair Bolsonaro hace unos días, como un modo de justificar su incapacidad y exquisito pendejismo, para manejar la crisis por Covid 19 en su país, salió positivo antier, ojalá y mejore pronto y aprenda de su error, nos leemos mañana. 

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