A los veracruzanos no les interesará saber las causas ni culpables; querrán saber qué es lo que proponen para resolver lo que les quita el sueño y hasta el hambre, y sobre todo saber si están dispuestos a que sus compromisos de campaña queden insertos en el Plan de Gobierno de obligado cumplimiento.
Así que, a prepararse, espejitos y promesas huecas ya no.
Los sabios bebedores de café prometen estar listos con los canillazos en la mano para el candidato que piense que ganar Veracruz es cosa de trámite. |