El coordinador de Comunicación Social del Gobierno del Estado, Alberto Silva Ramos, negó que de renovarse la dirigencia del CDE en Veracruz se busque proteger al gobernador, Javier Duarte de Ochoa, sobre todo cuando el mandatario se encuentra en un proceso de expulsión de esta fuerza política a petición del consejero nacional, Armando Barajas Ruiz.
Cabe señalar que el presidente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, pidió detener cualquier cambio en los Comités Directivos Estatales, principalmente aquellos en donde, el tricolor perdió la gubernatura, como en Veracruz.
Insistió en que dicha determinación se trata de un tema estrictamente del partido, de ahí que el Gobierno del Estado no tiene ninguna posición en lo particular en ese tema.
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“Yo creo que es un asunto que ya incluso los diputados federales y locales del PRI han expresado sus puntos de vista (de respaldar al gobernador incluso amagando con renunciar al partido)”, agregó Silva Ramos.
Sobre el proceso de expulsión, el coordinador de Comunicación Social recordó que es un tema que está analizando la Comisión Nacional de Justicia Partidaria al interior del PRI.
“Nosotros creemos que no hay ningún elemento que pudiera llevar ni siquiera a una amonestación por parte del partido a los cuadros que se encuentran en esta denuncia de un militante en lo particular.
“Evidentemente serán las instancias del partido las que tienen que tomar cartas en el asunto”, agregó el coordinador.
Finalmente, dijo que al interior del priismo veracruzano no ven ninguna posibilidad de que ocurra la expulsión de Duarte de Ochoa, asegurando que no existen elementos contundentes para que esto pueda ocurrir. |
