Al parecer el gusto del PAN-PRD de gobernar Veracruz será muy corto debido al fuerte empuje popular de López Obrador y MORENA. Así lo huelen los sabios de la política al enterarse del hipotético acuerdo de Los Pinos entre Peña Nieto y Ricardo Anaya, para frenar el arribo a la Presidencia del tabasqueño. Lo reseñado por el columnista Salvador García Soto, confirma viejos murmullos de una alianza PRIAN para el 2018. En esa jugada habría un candidato a la Presidencia apoyado “de facto” por ambos partidos y como acuerdos colaterales, el Estado de México sería para el PAN con Josefina Vázquez Mota y Veracruz podría ser para el PRI con Pepe Yunes (el veracruzano más cercano a Videgaray, promotor del mencionado Pacto), o para MORENA para que tenga una paleta que chupar cuando le quiten la Presidencia. Lo que sí es un hecho, es que en el imaginario de las concertacesiones y alianzas de facto, en caso de que Josefina se quede con Edomex, la moneda de cambio tendría un nombre: Veracruz. Y ahí sí, adiós a los sueños monárquicos yunistas. |