Winckler es el brazo legal de Yunes Linares; es el yunque y el martillo, y no hay forma que el Gobernador permita que lo destituya el Congreso, sería aceptar que se equivocó, sería reconocer no haber puesto a los mejores hombres y mujeres. En Winckler el Gobernador tiene el crisol perfecto para la fundición de su voluntad irreductible, es el vaso de precipitado para la alquimia en que transforma sus razones políticas en verdades jurídicas. Es quien le ha dado resultados “extraordinarios”, aunque los demás no estén de acuerdo.
Yunes Linares seguirá apoyándose con los Secretarios de Despacho con los que empezó, y si hay algún movimiento será por decisión propia, personalísima y unilateral del Gobernador. ¡Faltaba más!
Clementina Guerrero no ha podido arreglar los problemas financieros… y ahí sigue.
Téllez Marié no ha podido disminuir los índices de inseguridad… y ahí sigue.
Jorge Winckler seguirá, no le quede duda, pues a Winckler lo puso Yunes, y sólo Yunes lo podrá quitar.
@atticuss1910 |