El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pasó un momento incomodo, como los que él mismo ha hecho pasar, cuando la primera dama de Polonia, Agata Kornhauser-Duda, evitó en un principio saludarlo, al dejarlo con la mano extendida. El suceso ocurrió durante la visita de Trump al país europeo, cuando al momento del saludo oficial entre los mandatarios de ambos países, Agata Kornhauser-Duda se siguió de largo para saludar primero a la primera dama estadounidense, Melania Trump. Este hecho causó asombro y un gesto de molestia a Donald Trump, quien estaba junto a su homólogo polaco, Andrzej Duda. Sim embargo, momentos después, la primera dama polaca por fin saludó a Trump. El mandatario estadounidense se ha hecho famoso por causar escenas incómodas a la hora de saludar a otros líderes extranjeros. Este último episodio con la primera dama de Polonia podría ganarse un merecido lugar en la galería de los apretones más embarazosos protagonizados por el presidente estadounidense. |