Estamos a dos días de que terminen las campañas y que venga el tiempo para la reflexión desde la noche del próximo miércoles.
Los cientos de candidatos le apuestan al viejo esquema de mostrar músculo y enviar un mensaje a los indecisos para que voten por ellos y no desperdicien su voto en quienes se ve, según ellos, no tienen oportunidad de ganar.
Así, en la mente de los electores estarán por un lado los datos de las encuestas y de los tumultuosos cierres de campaña, a ver cuál de los dos mensajes resulta ser más efectivo.
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