“Las medidas se basan en evidencia científica y se alinean con acciones similares que se están tomando en la Unión Europea y otros países. También se apoyará el desarrollo de un plan de acción para el Consejo Canadiense de Ministros de Medio Ambiente para implementar la Estrategia a nivel de Canadá sobre Cero residuos plásticos”, estimó.
Dijo que la contaminación plástica es un desafío global que requiere acción inmediata. “Los residuos plásticos terminan en nuestros vertederos e incineradores, cubren nuestros parques y playas, además contaminan nuestros ríos, lagos y océanos, enredando y matando tortugas, peces y mamíferos marinos”.
“Menos del 10 por ciento del plástico utilizado en Canadá se recicla. Sin un cambio en el curso, los canadienses tirarán un estimado de 11 mil millones en materiales plásticos cada año para 2030. Hemos llegado a un momento decisivo, y este es un problema que simplemente no podemos permitirnos ignorar”, puntualizó.
El primer ministro canadiense destacó que “al mejorar la forma en que manejamos los desechos plásticos e invertir en soluciones innovadoras, podemos reducir 1.8 millones de toneladas de contaminación por carbono, generar miles de millones de dólares en ingresos y crear aproximadamente 42 mil empleos”.
Trudeau consideró que cuentan con la costa más larga del mundo y una cuarta parte de las aguas dulces del mundo; por ello, Canadá tiene una responsabilidad única, y una oportunidad para ser líder en la reducción de la contaminación plástica.
“Desde el lanzamiento de la Ocean Plastics Charter en la Cumbre del G7 de 2018 hasta la inversión en nuevas tecnologías canadienses que convierten los desechos de plástico en recursos valiosos, estamos haciendo precisamente eso. Juntos, podemos fortalecer nuestra economía y dar un paso importante hacia la protección de la vida silvestre y los lugares que los canadienses adoran”, apuntó.
Catherine McKenna, ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático de Canadá apuntó que “todos hemos visto las imágenes perturbadoras de peces, tortugas marinas, ballenas y otros animales salvajes heridos o muriendo a causa de la basura plástica en nuestros océanos”.
“Los canadienses esperan que actuemos. Es por eso que nuestro gobierno tiene la intención de prohibir productos plásticos dañinos de un solo uso donde la ciencia lo justifica, y por qué estamos trabajando con socios en todo Canadá y en todo el mundo para reducir la contaminación plástica”, apuntó.
“Tomar estos pasos ayudará a crear decenas de miles de empleos de clase media y hará que nuestra economía sea aún más fuerte, al mismo tiempo que protegemos a los peces, las ballenas y otros animales salvajes, y preservamos los lugares que amamos", destacó la funcionaria.
Por su parte, Jonathan Wilkinson, Ministro de Pesca, Océanos y la Guardia Costera de Canadá puntualizó que “la salud de nuestros océanos es vital para el bienestar económico, cultural y social de las comunidades costeras de Canadá”.
“Sabemos que la contaminación plástica daña los océanos, la vida silvestre, las comunidades y nuestra economía de Canadá. Es un problema que simplemente no podemos permitirnos ignorar. Estamos trabajando con la industria para prevenir y eliminar los aparejos de pesca fantasma, para proteger a los animales marinos y el medio ambiente marino ahora y para las generaciones futuras", dijo. |