Apenas pisó Lozoya suelo mexicano, el Ministerio Público ordenó trasladarlo a un hospital ya que un perito de la FGE le detectó ‘anemia desarrollada y problemas sensibles en el esófago, así como una debilidad general en toda su salud’.
Al Reclusorio Norte donde supuestamente sería internado solo llevaron a Lozoya para el registro oficial, así que Javier Duarte ni se enteró, quizá ya dormía.
Y pues con todo lo que Lozoya sabe y ha prometido voluntariamente desembuchar pues sí hay razón de tratarlo muy bien, de ponerle pañales de seda e instalarlo en un lujoso y caro hospital privado.
¡Lozoya No es un reo común!
Es un reo que podría salvar de la debacle electoral a la 4T en el 2021 y hay que tratarlo a cuerpo de rey e impedir que algún trasnochado reo de la cloaca del Reclusorio Norte le quiera hacer daño.
El Show empezó la madrugada de este viernes 17 de julio, anótelo. |