Las personas la ayudaron y llamaron a los uniformados quienes inmediatamente activaron un plan para detener al supuesto ladrón y así fue como comenzaron una persecución por varias calles a la que se sumaron motociclistas, taxistas y carros particulares.
Finalmente, los uniformados lograron interceptar al presunto auto robado y los agentes esposaron al conductor y su compañera. Sin embargo, la sorpresa fue que cuando los policías revisaron los papeles del auto y descubrieron que el hombre que viajaba en él era el propietario del vehículo.
La mujer, el esposo y la amante fueron llevados a la estación de policía para que se les aplicara una sanción por utilizar de esta manera el apoyo de las autoridades.
“Este tipo de engaños son inauditos, nuestros uniformados arriesgaron su vida emprendiendo una persecución a toda velocidad para recuperar un vehículo que supuestamente había sido robado, cuando al final establecimos que se trataba de una mujer dolida que solo quería evitar que su esposo escapara con otra”, dijo el comandante de la Policía Metropolitana, Óscar Solarte. | 
