La joven acudió a la estética, en Lanús, Argentina, para retocar sus raíces con un poco de decolorante para estar lista para su próxima fiesta de XV años.
Aunque Sheila ya había acudido al negocio en dos ocasiones y como no había habido ningún problema, no tuvo dudas en realizarse nuevamente el procedimiento ahí, sin embargo en esta ocasión el resultado fue fatal, puesto que poco a poco su cabello se le fue cayendo y es que la estilista le dejó el producto para decolorar más del tiempo necesario, pues salió a fumar por un rato.
Cuando la estilista comenzó a lavarle el cabello, la joven notó que su cabello comenzaba a caerse, pues su cabello se había quemado.
La madre de la joven llegó al lugar, pero la encargada del negocio, negó su responsabilidad culpando al producto para decolorar el cabello. Hasta el momento la dueña de la estética no se hizo responsable del daño a la adolescente.
|