Todo parecía que esta vez José Manuel del Río iba en firme, pues un día antes subió a sus redes sociales un video en el que se le ve intercambiando un saludo con Dante Delgado, con un mensaje en el que asegura “Estamos listos. Un nuevo Veracruz viene en camino”.
Todo cuadraba, parecía lógico, sobre todo porque según el resultado de una encuesta, indicaba que era mejor para el MC ir solos que mal acompañados en el 24 y que lo mismo sucedería en Veracruz.
Todo parecía indicar que en Veracruz el candidato por los anaranjados sería del Río Virgen, pero al parecer no es así, pues el observador y preciso columnista Raymundo Jiménez comenta al respecto lo siguiente:
“Tremendo chasco se llevaron ayer los reporteros y columnistas xalapeños que fueron invitados a un desayuno con José Manuel del Río Virgen, secretario técnico de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado, pues la mayoría presuponía que el militante de Movimiento Ciudadano (MC) aprovecharía este encuentro con los medios capitalinos para “destaparse” como aspirante del partido naranja a la gubernatura y hablar de la sucesión estatal de 2024, pero el exdiputado federal y ex alcalde de Tecolutla se avocó a detallar el trabajo social que viene realizando junto con el abogado penalista Tomás Mundo Arriasa a través del llamado “Proyecto Inocencia” para excarcelar principalmente a indígenas que han sido procesados y recluidos ilegal e injustamente en Veracruz y en otras entidades”.
Y pues sí, lo que más parece es que del Río se alienta inocentemente un día sí y al otro no. Lo curioso del caso es que también informó que recorrerá todo el Estado para promover el llamado "Proyecto Inocencia", lo que en estricto sentido, cualquiera que tenga dos dedos de frente, puede entender que eso y las llamadas Asambleas Informativas que hacen las corcholatas de los otros partidos, es lo mismo. O sea, sí pero no, jala y se pandea, parece firme y luego da tres pasitos al costado. Así, con esa decisión, está muy complicado creerle.
A ver si mañana del Río vuelve a decir que sí. Pero mejor no le contamos más. Lo invitamos a leer a Raymundo Jiménez y su columna completa aquí. |