Sin embargo, en el Centro del país deberán correr el riesgo.
Y es que no les queda de otra, pues saben que sus estructuras quedaron dañadas y desarticuladas desde el 2018 y que sus liderazgos regionales buscaron otros caminos partidistas hacia MORENA y Movimiento Ciudadano.
Hoy, apenas si el PAN, PRI y sobre todo el PRD, han logrado mantener en pie sus Comités Directivos Estatales y eso sobreviviendo en luchas estériles y de grupos.
La pregunta es, ¿Podrá quien represente al FAM en Veracruz vencer a MORENA, con un voto incierto de la sociedad y sin acceso a los viejos trucos como el carrusel, llenado de urnas y sin movilización de masas?
La película es muy clara y esos parecen ser hoy por hoy los retos de una oposición con escasa credibilidad, que juega sin canicas para la promoción de imagen y que para su desgracia, no ha contado en varios años con una ‘Caja chica’ para cicatrizar a sus huestes después de los descalabros sufridos en el 2018, 2021 y 2022.
Así, hoy el panorama de los partidos de oposición es complejo, ya que depende -como antes no lo hizo- del voto blanco de la sociedad civil.
Los canillazos de hoy son para aquellos gobernantes ambiciosos que hicieron lo que nunca debieron: matar a la gallina de los huevos de oro. |