Cierto, ahora la presidenta Sheinbaum trató de corregir (y qué bueno), pero el muerto ya apestaba y seguirá apestando de impunidad manifiesta.
Sheinbaum firmó el decreto de la desincorporación por fusión de Seguridad Alimentaria Mexicana y le endilga sus funciones a Diconsa.
¡Un relajo y un espantoso oso institucional!
SEGALMEX, la mancha de la corrupción más palpable en la 4T, conservará su personalidad jurídica exclusivamente para efectos del proceso de desincorporación.
De nuevo, la corrupción se perdonó, la impunidad a los amigos funcionó de nuevo y el sueño de impulsar la producción del campo y satisfacer las necesidades básicas de los consumidores pagó las consecuencias.
Como dicen en el pueblo de AMLO en Tabasco “para tumbar los patos hay que talar el árbol”.
Pero de lo robado nada se sabe.
No funcionó revivir a CONASUPO y el campo y el magno proyecto de AMLO fue un fenomenal fracaso. |