Además, las personas que tienen a presentar esta patología sienten fascinación por viajar hacia lugares desconocidos, presentan una fuerte tendencia a buscar nuevas experiencias emocionantes y desafiantes, que los movilicen; sin embargo, muchas veces pueden poner en riesgo su vida en la búsqueda de mayores emociones, pues suelen sentir tedio o aburrimiento por la rutina.
Ibáñez Ruelas agregó que la curiosidad, la excesiva estimulación y algunas personalidades que son más abiertas, aventureras o con una mayor necesidad de estimulación, pueden ser propensas a padecer dicho trastorno.
"A ello se suma la influencia social, donde las redes tienen un papel de suma importancia, pues las personas neófilas suelen ser líderes de opinión y tener muchos seguidores en las redes sociales; a su vez, su influencia puede ser importante para las marcas, ya que les ayuda a conocer lo que quieren los consumidores", comentó la psiquiatra.
Cabe señalar que la neofilia o atracción por lo nuevo, puede agravarse derivado de la publicidad en redes, donde les sugieren un alto estatus social, lo que los hace vivir una situación de depresión y ansiedad si no logran su objetivo, a pesar de ello esta sensación de bienestar dura muy poco.
"Este trastorno puede resolverse con la terapia cognitivo conductual, que ayudará a comprender mejor los patrones de pensamientos y comportamiento, a través de estrategias y herramientas para manejarla, incluso en casos graves, mediante tratamiento con base en antidepresivos y neurolépticos o disminuir el impulso", afirmó la especialista.
Para finalizar, la psiquiatra exhortó a permanecer atentos a la conducta de jóvenes y adolescentes, pues desear cambiar equipo de celular dos o más veces por año cuando el actual todavía se encuentra funcional o cuando se prioriza por sobre las necesidades básicas, puede ser un dato de alarma y aconsejó acudir en busca de ayuda profesional. |