La mejor señal de que el hijo de Fidel Herrera, el joven diputado plurinominal federal Javier Herrera Borunda, viene por la candidatura al gobierno del estado para el siguiente periodo que arranca en el 2024, es el ungimiento del político tuxpeño Alberto Silva Ramos como dirigente estatal del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), cuyo anuncio se hará oficial en cuanto se tenga el resultado de la impugnación de la elección municipal de Tuxpan.
No estamos anunciando el arranque de la carrera gubernamental ni nada por el estilo, ese tipo de cosas no se anuncian generalmente obedecen a la percepción de los comunicadores, de quienes se dedican al análisis de los asuntos públicos. Los políticos se manejan por circunstancias, Miguel Alemán Velasco, por ejemplo, hubiera querido ser gobernador del estado muchos años antes solo que su señor padre no le permitió que participara en política mientras vivió; Fidel Herrera Beltrán nos comentó que el proyecto de la gubernatura lo acariciaba cada que había relevo desde los tiempos de Acosta Lagunes.
Otro de quien pudimos conocer su punto de vista al respecto fue Dante Delgado Rannauro, gobernador sustituto o por cuatro años (suficientes para ser el mejor), quien terminó el sexenio de don Fernando Gutiérrez Barrios. Alguna vez se lo preguntamos al político cordobés siendo secretario de Gobierno y tajantemente nos dijo: siempre hay que tirar flechas a la luna, en mi condición de Secretario lo que me corresponde es llenar todos los vasos que encuentre y no estén completos y sin importar que no sean de mi área de acción, lo importante es que quien manda se dé cuenta que sabemos hacer las cosas, hay que hacerse indispensable.
Javier Duarte de Ochoa es producto de un cariño de hijo que se ganó con doña Rosa Borunda quien vio en el joven a una persona talentosa, capaz, eficiente, responsable y que le tira a Fidel su candidato para imponer a Duarte. En este caso fue la circunstancia afectiva de la primera dama del estado con el gordito, de otra forma a lo mejor nunca hubiera sido gobernador.
En Veracruz Cuitláhuac García Jiménez ganó la gubernatura como premio a su perseverancia, él anduvo durante muchos años en las filas del amloísmo como activista, y fue candidato a la gubernatura en el 2016 y perdió, pero no se amilanó, siguió luchando al lado de su líder y guía y logró la gran oportunidad; su participación como candidato al gobierno en el 2018, en la elección que Morena con López Obrador a la cabeza arrasó, gracias a la terquedad del tabasqueño quien tras 18 años de campaña cosechó lo que sembró, echándose en hombros a gobernadores, senadores, alcaldes, diputados federales y locales que ganaron por el llamado “efecto peje”.
La de Cuitláhuac fue una circunstancia que le favoreció, estar en el lugar adecuado a la hora precisa. Compitió con Miguel Ángel Yunes Márquez quien intentó suceder en el cargo a su papá, con los resultados que todos conocemos: el amloísmo barrió con todas las expectativas de cambio en todo el país.
A estas alturas en palacio de Gobierno hay aspirantes que no pierden la oportunidad para demostrar poder, para dar un paso al frente y mostrar que son lo más adecuado para suceder a Cuitláhuac, nos referimos al secretario de Gobierno Erick Cisneros Burgos. Otra que trae muy fija la idea de ser gobernadora en al 2024, es la secretaría de Energía del gobierno federal Rocío Nahle, quien con el desgaste a que se viene exponiendo en el cargo que tiene posiblemente no llegue a la meta y decida apoyar a Cisneros Burgos.
Otros aspirantes de otros partidos los tenemos que mencionar, porque los conocemos y sabemos de sus capacidades, como son el diputado federal José Yunes Zorrilla, del PRI, otro del mismo partido sería Héctor Yunes Landa, y hay que esperar a ver el papel que hace la diputada local plurinominal Anilú Ingram Vallines.
En el PAN la estará pidiendo nuevamente Miguel Ángel Yunes Márquez, el ingeniero y Senador de la república Julen Rementería del Puerto, y si quieren lanzar, con el respaldo de la alianza PAN-PRI-PRD a un auténtico trabuco, todos irán con el ingeniero y empresario Juan Manuel Diez Francos… ¡invencible!
Esas vacunas son balines
Once casos documentados de personas que se vacunaron para “prevenir” el impacto de la infección por Covid-19, con el esquema completo que viene aplicando el gobierno de la República, se contagiaron y murieron. Se trata de seis personas de la ciudad de Hermosillo en Sonora; cuatro maestros de Chilpancingo en el estado de Guerrero y un dentista de Nuevo León, cuyos casos están provocando alarma entre los mexicanos que ya han sido vacunados, más los millones que aún no les toca y que son la mayoría pero que están exigiendo al gobierno de López Obrador que adquieran más vacunas para ser inmunizados con el biológico. Ante esta situación de inseguridad de la vacuna, epidemiólogos del sector salud recomiendan a la población no confiarse, aunque les apliquen una dosis de cualquier vacuna, y que sigan las recomendaciones de higiene que se sugieren para evitar contagios como es el uso del cubre bocas, lavarse constantemente las manos y aplicarse alcohol o gel antibacterial, no acudir a reuniones donde estén presentes muchas personas, estar de preferencia en lugares abiertos bien ventilados porque esta es la manera más segura de protegerse de un posible contagio. En Veracruz el sector salud tiene paralizada la campaña de vacunación, y las personas de 50-59 que no alcanzaron a aplicarse el biológico por las razones que se quieran, están exigiendo que les apliquen la segunda dosis para tener el esquema completo; los de 40-49 solo los entusiasmaron al anunciar que se abría la plataforma para inscribirse, igual que los de 30-39 porque a dos semanas de distancia nadie informa para cuándo estarán disponibles sus vacunas. Todo parece indicar que al gobierno morenista le urgió aplicar todas las que se pudieran antes de la elección del seis de junio y ya. En este momento los veracruzanos enfrentamos dos problemas; uno la falta de vacunas y dos la inseguridad que están mostrando en otras entidades donde vacunados se han infectado y han muerto. El catálogo de recomendaciones sanitarias que se vienen aplicando en todo el mundo es lo más seguro que hay para evitar contagio… A cuidarse.
Irma Eréndira, la más corrupta de la 4T
Cuando Irma Eréndira Sandoval se desempeñaba en el gabinete del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), como secretaria de la Función Pública, en tiempos cuando la pandemia permea el país y la bandera de la Austeridad Republicana se pregona desde los altos niveles de gobierno, fue dado a conocer que ella y su pareja, el investigador John Ackerman, contaban con millonarias propiedades. Cuando en la Ciudad de México gobernaba el hoy secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, Eréndira Sandoval recibió como regalo un terreno de 253 metros cuadrados al sur de la capital que hoy está valuado en seis millones de pesos, reportó el portal LatinUS. Además, se encontró que la pareja cuenta con otras cinco propiedades adquiridas en tan solo nueve años, cuando ambos se desempeñaban como académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Todas ellas fueron pagadas de contado. Estos departamentos y casas se encuentran en zonas de alta plusvalía e la capital y en el municipio de Tepoztlán, Morelos. El costo total de las propiedades asciende hasta los 60 millones de pesos, según lo valuado en el mercado. Esta cifra es cinco veces mayor que lo que la funcionaria reportó en sus bienes inmuebles como parte del gabinete de López Obrador. El lugar que obtuvo como obsequio de la administración de Ebrard fue trasladado a Eréndira Sandoval en agosto de 2007, 13 años después de que el gobierno capitalino lo escriturara como propio. Al recibir el millonario terreno, Irma Eréndira Sandoval era coordinadora de Laboratorio de Documentación y Análisis de la Corrupción y la Transparencia de la UNAM. Mientras que su esposo, John Ackerman, era trabajador del Instituto de Investigaciones Jurídicas. Para ese entonces, ambos personajes habían hecho explícitas su aceptación y apoyo a López Obrador. Pero además Irma Eréndira Sandoval fue corrida de la Secretaría de la Función Pública, por haberse prestado a proteger delincuentes que laboran como importantes funcionarios al lado del presidente López Obrador, como son los casos de Ana Gabriela Guevara y Manuel Bartlett Díaz. Además en su calidad de secretaria, una empresa sin empleados y sin experiencia, que tiene su domicilio en la parte superior de una tienda de abarrotes, vendió a la Secretaría de la Función Pública (SFP) pruebas rápidas para detectar Covid a un precio 3 veces más caro de lo que cotizaron el IMSS y otras dependencias federales por pruebas de características idénticas, de acuerdo con un cotejo realizado por Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI). Por 90 kits, cada uno con 25 pruebas, la SFP pagó un millón 046 mil 250 pesos a la empresa Grupo Val Integra SA de CV. Cada paquete fue pagado en 11 mil 625 pesos (sin IVA) mientras que en dos estudios de mercado elaborados por el IMSS en diciembre de 2020 y enero de 2021 se identificó que los proveedores Productos Roche, Abalat y Fármacos Dinsa vendían un kit similar en un rango de 3 mil 100 y 3 mil 250 pesos. Estas son las ratotas de la 4T.
REFLEXIÓN
Sorpresiva la renuncia de Javier May Rodríguez como coordinador nacional del programa Sembrando Vida. El senador con licencia dejó el cargo argumentando que la secretaria de Bienestar, María Luisa Albores González, abrogó unilateralmente las facultades requeridas para operar dicho programa. En la 4T se muerden en serio. Escríbanos a mrossete@yahoo.com.mx | formatosiete@gmail.com |