SI ALGO le hace falta a los principales actores de la cuarta transformación, es, sin duda, una buena asesoría en materia política.

Recientemente, se le interrogó al Gobernador del Estado, Cuitláhuac García Jiménez, acerca de la actividad política que viene realizando en el Estado, el actual Presidente de la mesa directiva de la cámara de diputados federal, Sergio Gutiérrez Luna, con la finalidad de que la sociedad conociera la opinión del mandatario veracruzano, respecto de este tema que ha generado mucha atención en los diversos sectores sociales de la entidad. La respuesta no pudo ser más desafortunada de parte de quien dirige, supuestamente, los destinos de Veracruz.

“No lo conozco”, fue la reacción inmediata del gobernante, quien de paso sabe perfectamente bien quién es el personaje sobre el cual se le preguntó.

A juicio de muchos veracruzanos, ésta no fue una manera correcta de responder, sobre todo, en política y tratándose de una persona que tiene una importante investidura y que representa a un pueblo altamente politizado.

Esto es una plena evidencia de que el Gobernador del Estado, se encuentra molesto de que un militante de Morena, se le haya salido del huacal, aunque todo parece indicar que no es así, puesto que el mismo legislador veracruzano, se tiene entendido, ha buscado la posibilidad de entrevistarse con quien representa la primera autoridad en el Estado.

Pero esto, de alguna manera, tiene explicación. García Jiménez, no comulga con Sergio Gutiérrez Luna, y más cuando todo mundo sabe que la presencia del político sureño, tiene que ver directamente con la aspiración, que bien no se ha revelado, a la gubernatura del Estado, donde el mismo mandatario, mantiene interés personal en que la candidata de Morena, sea Rocío Nahle, actual Secretaria de Energía, del gobierno federal.

Falta pues, sensibilidad política, experiencia y capacidad para poder digerir estos episodios de la vida política de Veracruz, despojándose un poco de la prepotencia que el poder incuba. La política, para quienes la conocen, es entendimiento, más no hostilidad y enfrentamiento.

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LA ESTRATEGIA DEL PRESIDENTE.

ANTE LA NOTABLE disminución de popularidad que está sufriendo el Presidente de la República, aunque muchos digan lo contrario, la estrategia política del futuro inmediato que se está delineando es fortalecer a la cuarta transformación, con la integración de más personajes de la oposición, entre ellos, algunos de los gobernadores que están por dejar sus respectivos cargos. Esa es la jugada, al parecer, que mejor ha encontrado en estos días el mandatario nacional, porque entre las filas de su equipo político, así como entre la militancia de Morena, no parece tener los suficientes elementos que le permitan cuajar su proyecto político.

La carencia de buenos políticos ya se ha visto desde el inicio de esta administración, ya que el Presidente, no tuvo la cantidad necesaria para poder escoger a sus colaboradores, tanto que a estas fechas ha padecido de grandes problemas, porque no confía en ninguno de los que nombró, tanto que ha tomado personalmente la solución de muchos casos que debieran corresponder a quienes puso en las cabezas de las principales dependencias gubernamentales.

Es ahora que trata de matar dos pájaros con una sola pedrada, pues por un lado fortalece su proyecto político y por el otro se hace de buenos y experimentados políticos que quedarán sin chamba pública dentro de poco tiempo.

Y aunque muchos políticos que forman parte de Morena, y de la cuarta transformación se pongan celosos, como suele pasar en Veracruz, la verdad de las cosas es que dentro de esta nueva camada de políticos en el poder no había la suficiente capacidad para enfrentar el reto de gobernar a un Estado, incluso al país, por lo que ahora el mismo Presidente, está prefiriendo allegarse más ex priistas, más ex panistas y ex perredistas, con la finalidad de poder salir adelante, completando verdaderamente su equipo y respaldando de esta manera el establecimiento de su propio gobierno, cuestión que pretende hacer durante la segunda mitad de su administración.

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OTRA VEZ, SE ESCUCHAN LOS RUMORES.

DE NUEVA CUENTA se anda diciendo que el Gobernador del Estado, Cuitláhuac García Jiménez, podría ser relevado en breve, quizá poco después de que cumpla la primera mitad de su gobierno, lo que hasta se ha pronosticado que sería en el mes de enero, debido a que el Presidente de la República, quiere a alguien con mayor presencia política en la entidad, a fin de poder preparar con mayor empeño y seguridad, la sucesión en el dos mil veinticuatro, ya que también la sucesión presidencial, requiere del respaldo de cada entidad donde gobierna Morena.

Lo de la sucesión en Veracruz, todo parece que ya se tiene resuelto, pero antes tienen que fortalecer políticamente a la entidad, por lo que usarán las estrategias políticas necesarias, toda vez, que ya se han dado cuenta que las cosas no serían tan fáciles como sucedió en el dos mil dieciocho.

Y aunque en el corazón del Presidente, Cuitláhuac García Jiménez, esté bien colocado, para estos menesteres, primero son los intereses políticos del proyecto y luego los quereres, que para este caso no se dudaría mucho en sacrificar.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.