“Las canas y las ganas no son ni recomendación ni condena al ostracismo”
“… un día llegará que ya, de tanto ir y venir rodando, el cuerpo me dirá que no, que pare que ya está cansado, un día llegará que ya que tenga que parar muy caro, por el ansia de llegar más alto… seré quien todo lo dio por triunfar… un potro a quien nadie domó, solo los años…
Camino por un largo pasillo, se escuchaba a José José, al llegar a la sala, Orlanda apaga la romántica música… ¡ no ¡ fue mi exclamación, es mi cantante preferido.
-Orlanda dice, es José José sobrino de mi viejo Felipe Sosa, o sea José Rómulo Sosa Ortiz, vivió allá en Azcapotzalco…solo bajaré volumen.
-Cierto, nació el mismo año que yo, dije… 1948 y murió en septiembre de 2019, en Florida.
“Me retiré de mi trabajo satisfecha cosechando infinidad de amistades, en tesorería municipal, en el juzgado, en el registro civil y como secretaria del ministerio público municipal y en todos los cargos cumplí… recuerdo el trato amable de don Chuchito Anell, el juez de todos los años, su experiencia y su conocimiento de la historia de Teocelo, ahí llegó cuando pasante de Derecho, Jorge Uscanga Escobar, de hecho fue aquí en donde inició su carrera política y como presidente municipal de Xalapa, fui a visitarlo, me trató dignamente, y en la Procuraduría fui a verlo por un problema de mi hermano Cecilio, el “torito” y defendía lo justo, me recibió con amabilidad y con el enojo de la secretaria, y más la molestia del agente del MP de Coatepec, quien estaba actuando a favor de los culpables… fueron varios pasantes de Derecho que llegaron como jueces, uno de ellos murió en un accidente en la barranca de Texolo… recuerdo a Revoulen, muy amable y su esposa Betzabé Moreno, pero en cuanto a los alcaldes, hubo de todo, malos, regulares… comenta Orlanda Sánchez, semblante triste ante tantas anécdotas.
Así es Orlanda -agregamos – traté a Jorge Uscanga como coordinador de la campaña política de Miguel Alemán Velasco, llevaba a la vez muy de cerca los medios de comunicación, fue Subsecretario de Gobierno en este sexenio, ya había sido Procurador de Justicia, alcalde de Xalapa, diputado, y su hermano Alberto presidente de Catemaco, allá lo entrevisté en el Hotel Finca, por cierto, propiedad de José José… y estoy de acuerdo contigo Orlanda, no tenemos por qué tolerar a los alcaldes frívolos u oportunistas, léperos y perversos, rodeados de pendejos asesores vividores como el que se acaba de ir, y se aprovechan de esos alcaldes cultivados en la ignorancia y en los desplantes y vanidades…
-“En mis 40 años, Mora, aprendí a tratar al presidente mentiroso y fueron muchas veces las que me hicieron llorar con la amenaza de despedirme y contar todo nos llevaría horas y horas, citando una cuando me designaron secretaria escribiente del juzgado municipal, en el gobierno de Teófilo Martínez y su pariente lo nombró secretario del ayuntamiento… ya cuando tuvieron que dejar los cargos, se les hizo fácil quitarme y dejarme sin trabajo para que regresara su pariente al juzgado, no lo consiguieron y ya sabes la que se armó pero me defendieron y más don Chuchito y seguí un poco ahí y ya después al registro civil…
Creo en mi manera personal y por tantos años en el ayuntamiento, que sirven más al pueblo los que llegan con experiencia y su trato diario con la gente, como don Luis Anell, Angel Gómez, pocos lo hicieron, los demás en su mayoría maestros y pues no, dos de ellos demasiados groseros, de Mario Pérez puedo decir que fue un buen alcalde y tratable con su pueblo. En la administración de Lovillo me jubilé, me querían aplicar la ley del hielo, una quincena me tuvieron alejada, si me la pagaron y opté por la jubilación.
“Llevo en mi mente muchas anécdotas, cuando los candidatos del PRI, impopulares, hacían las convenciones a escondidas allá en lo que fue la escuela Apostólica y me encargaban parte de la organización, citaban a las organizaciones del PRI, mi papá siempre del sindicato de cargadores, muy estimado y querido, me cuidaba y no faltó quien enojado dijera que me quedaba a tomar licor con los candidatos y su gente para celebrar y no fue así, pero lo tomé como parte de lo que es una campaña política…
Tengo que mencionar a las esposas de los alcaldes, una de allá Lupita, de Rafael Tejeda Soto, Malena, de Toño Gómez, muy sensibles a las causas del pueblo, me confiaban y creían en mi trabajo y sin sueldo extra las apoyé siempre por las tardes, por las noches, en las comunidades y esto me sirvió para ganar amistades, como la familia Marín de Llano Grande, una excelente familia y otras más en Monte Blanco, con Amadeo y con Damián, en Baxtla con los Maján, aquí en Teocelo, en las colonias… hacíamos labor social además de ser empleadas del ayuntamiento, Tere Vanda, Chata García, Rafita, y siempre con entusiasmo… dejamos parte de nuestra vida juvenil y madura sirviendo a Teocelo, sin altanerías ni engaño, solo con el trato razonable, con aprecio a los demás… en lo personal y lo comentaba con algunos alcaldes de confianza, “si votaron por ustedes pues deben conservar al pueblo como amigo”, pero muchos alcaldes hicieron lo contrario, casi siempre con aire azorado, inseguros pero malvados.
.Si, Orlanda, desgraciadamente así es y sigue siendo, prefieren escuchar aplausos comprados y no aceptan que, como decía Shakespeare, “caminemos pues, dándonos la mano y uno delante de otro”…
Una copa de vino y una de torito elaborado por Orlanda, sirvió de despedida, mientras dejamos que saliera al aire, al hermoso patio con flores y el silencio:
“… bohemio, porque me gusta la noche, porque mi vida es derroche, lo que la vida me dio, bohemio hasta el final de mis días, porque no tengo medida, porque es así como soy… |