No está muy claro si el objetivo central era el secretario de Educación, Zenyazen Escobar, pero lo que sí es evidente es que, a menos que en la asignación de contratos salga a relucir otro miembro destacado del gabinete, él es hasta ahora la figura pública más relevante del affaire “Araly”.
El nerviosismo con el que ha actuado Zenyazen Escobar sugiere que la exhibición de una empleada administrativa de su sector (Araly Rodríguez Vez) como la pieza central de una amplia red de operación de empresas “fantasma”, pone en riesgo todo su proyecto político y profesional.
Nadie, desde los tiempos en los que el Orfis llamó la atención sobre las asignaciones directas (2020), o desde que el diputado Marlon Ramírez llevó el tema a la glosa del informe de gobierno en el 2021, cuestionó la legitimidad del empleo que Araly Rodríguez tenía en la SEV.
Acaso se hacía referencia a ese estatus laboral, para llamar la atención de la disparidad entre su ingreso como empleada del gobierno estatal, con la millonada que estaba facturando.
Este jueves, sin embargo, Zenyazen Escobar se apresuró a informarles a los reporteros que lo cuestionaron sobre ese tema, que Araly Rodríguez llegó a cubrir un interinato administrativo “a propuesta de un sindicato”, pero que -además- su contrato ya no sería renovado.
¿Por qué?
¿Incurrió, acaso, en alguna falta grave cubriendo ese interinato?
¿Se castiga el escándalo, antes que el pecado?
“Vamos a dar corte a este interinato y que el Sindicato que propuso a esta compañera nos dé otra propuesta (…) Es muy burdo y la organización sindical, cuando vino y nos hizo la propuesta, nos llevamos la gran sorpresa de cuántos millones (facturaba) y como tal, con diferentes dependencias, no con la SEV”.
Cuesta trabajo pensar que todo este alboroto se haya armado para perjudicar a Zenyazen Escobar, quien no figura, ni lejos, entre los personajes de Morena con mayores posibilidades de sustituir a Cuitláhuac García en el gobierno estatal, y la siguiente posición en importancia, el Senado, es peleada por no menos de diez actores políticos de Morena y sus partidos aliados.
Suena más a que “le pegó de rebote”, en una especie de carambola, y salió lastimado en un tema que no es el más delicado de su área.
El tema realmente grave en la Secretaría de Educación es la venta de plazas. Ya hay testimonios que señalan a personajes muy cercanos al secretario y explican la operación para asignar plazas del Sector Educativo por fuertes sumas de dinero.
Cuando ese tema estalle, entonces sí se va a sacudir el gobierno estatal.
Una prueba más de que no son como “los de antes”.
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Epílogo.
Quienes pensaron que la enorme inflación vivida el año pasado era una “pesadilla” que desaparecería en el 2023, se equivocaron. *** En el primer mes del año, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó una variación mensual de 0.68%, mientras que a tasa anual se ubicó en 7.91 por ciento. *** La inflación volvió a acelerar con el inicio del presente año, tal como los analistas esperaban ante la llamada cuesta de enero. *** Información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), advierte que estas cifras representan el mayor incremento anual para un mes de enero desde el 2001, cuando los precios al consumidor incrementaron en 8.11 por ciento. *** Parafraseando a un viejo político veracruzano: “Vamos mal, y viene lo peor”.
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