Una señora me pregunta que quién creo que vaya a ganar, quién de los candidatos tiene mejores propuestas, quién es bueno o buena, cuál sería el o la mejor gobernando… se refiere a Veracruz.

Aunque no lo aparenta, creo que su primera pregunta habla mucho de lo que es la votación en un alto porcentaje de la población: “Creer” quién va a ganar implica de cierto modo, un acto de fe, de esperanza, quizás no tanto sobre el candidato como en un deseo intrínseco de que ese voto en la urna sea el primer paso de que le vaya bien a esa persona que cruzó la boleta… Por supuesto, esa no fue la respuesta… pero le digo que percibo que va a estar algo cerrada, dependiendo del flujo de votantes.

Sobre quién tiene mejores propuestas, poco es lo que han enseñado porque apenas van a iniciar su campaña, pero los temas esenciales que he escuchado por el lado de la Oposición son algunos nuevos aderezados con los clásicos como Seguridad, Empleo, Inversiones… lo novedoso habla de la Salud, de reducir (no incrementar como dice Xóchitl) la edad para los beneficios del Adulto Mayor y también reducir las tarifas por el servicio de “luz”... En el caso del partido en el poder, se habla de un Segundo Piso y de la Continuidad de la Transformación, englobado esto bajo el espíritu santo del Presidente López Obrador y la figura de Claudia Sheinbaum…

Quién es el Bueno o la Buena, entonces le devuelvo la pregunta: Usted quién cree?

Ella piensa que es Nahle… “porque es mujer”, me responde cuando cuestiono el porqué.

Le hago otra pregunta: Votaría por alguien que no nació en Veracruz. De inmediato responde con un rotundo No.

Entonces, ¿Votaría por Pepe o Polo? No identifica a Polo, pero sí a Pepe, a quien le daría su voto… 

Quién sería mejor gobernando? Le digo que no lo sé, pues los cargos de representación popular son algo tan parecido como cuando se pide que nos recomienden a un plomero, un abogado, un doctor… aquí, los candidatos se recomiendan solos y ya depende de uno, si los emplea… luego se verá su trabajo. Por eso, algunas personas recuerdan a tal diputado, a tal alcalde, o a tal gobernador por el desempeño en sus funciones, y algunos quisieran que volvieran (no lo que se llevaron) porque les gustó la chamba…

Hasta donde sé, Pepe ha sido presidente municipal de Perote; Nahle no ha sido alcaldesa; Pepe ha sido diputado local y federal, así como Senador; a Nahle le falta ser legisladora del Palacio de Encanto… Pepe no ha ocupado cargo federal y Nahle sí, secretaria de Energía. A Pepe no se le puede medir en este ramo… a Nahle sí: ¿Qué sabe del trabajo de la señora? Pregunto a mi interlocutora… ¡Nada! Sí, no tiene obligación de saber (o sí?) aunque eso habla también de lo mucho que a veces deja de hacer un político o política en este caso, con ganas de ser gobernadora… Si no saben lo que hiciste, es como si no hubieras hecho nada… aunque a veces, eso es bueno, no para el elector, sino para el candidato… o la candidata en este caso.

La señora tiene una última duda: Su pensión como adulto mayor… ¿Qué pasa si gana Pepe Yunes? Nada, absolutamente nada le pasa a su pensión… este tipo de apoyos no tienen que ver con partidos políticos, menos con candidatos o resultados… “lo mejor” que puede pasar, le digo, es que reduzcan la edad, de 65 a 60, para ser beneficiario, aunque eso es un asunto ajeno al candidato o candidata a Gobernador… Aunque a mis 55 años, le digo que me siento en el cuerpo de un señor de 65, y por ende, creo que bien podría exigir mi Pensión en función de la percepción en que me encuentro. La señora se ríe… yo espero haber resuelto sus dudas y no ampliarlas más.