A SETENTA días de haber iniciado su gobierno, Claudia Sheinbaum, presidenta de México, no parece entender que Estados Unidos, es la nación, hasta ahora, más poderosa en lo político y desde luego, en lo comercial. Su relación con el futuro presidente de aquel país, Donald Trump, se complica cada día que pasa y esto puede desembocar, no precisamente en una guerra armada, en la cual México saldría que perdiendo aun cuando tenga un soldado en cada uno de sus hijos. No se trata, exactamente de pelear, sino de dialogar y llegar a los acuerdos necesarios para ambas naciones y en eso se tiene que demostrar la enorme preparación y capacidad en materia diplomática. Las altanerías deben quedar enterradas en el pasado y no volverlas a invocar, porque en lugar de ayudar, perjudican. Cierto es que se trata de un legado de quien gobernó al país recientemente, pero es de las malas herencias políticas que no se deben practicar.

No se puede imaginar un escenario político comercial, donde Estados Unidos imponga aranceles descomunales a las exportaciones de México, y que este país responda con otros más, todavía más elevados a lo que pueda importar del país del norte. Es, verdaderamente una locura que no tendría un buen fin, sino más bien una guerra comercial que llegaría a poner a México, quizá, en el caso de Cuba. Ahora que, si eso es lo que se quiere, adelante, pero entonces sí surgirán los soldados que México tiene en cada uno de sus hijos, pero no en contra de Estados Unidos, sino al mismo interior del país, donde la que saldría perdiendo sería la propia presidenta Sheinbaum.

Por lo pronto, se ve una complicada relación de México con Estados Unidos, a cuarenta días, aproximadamente, de que entre en funciones su nuevo gobierno.

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BOCHORNOSO ACTO

LA ACTITUD BÉLICA del senador de la república Miguel Ángel Yunes Márquez, azuzado por su protector de Morena, Adán Augusto López Hernández, quien fuera el negociador con el clan yunista, para que Morena obtuviera el voto mayoritario para la aprobación de la reforma judicial, fue más que otra cosa un bochornoso espectáculo político que viene a sumarse a los acontecimientos que dan vuelta al mundo en estos días de la cuarta transformación.

La respuesta de Miguel Ángel Yunes Márquez, a los comentarios que le hizo un panista de nombre Mario Vázquez, en la tribuna del senado fue una manifestación de poca experiencia política y de capacidad para enfrentar los retos políticos. El que se lleva se aguanta y parece que Yunes Márquez, no tuvo la suficiente prudencia para aceptar, incluso, las verdades que todo México, conoce.

Los Yunes del Estero, se encuentran en serios problemas con el pueblo de México y especialmente con los veracruzanos, donde difícilmente podrían volver al escenario político, salvo que sigan siendo arropados por Morena, aunque se ve lejana esta posibilidad, porque los morenos tampoco se arriesgarían a proponerlos políticamente, cuando menos en corto tiempo, por lo que sería mejor que esperaran en tanto pasa el tiempo, que según dicen, todo lo cura.

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EXCELENTES RESULTADOS

TAL Y COMO LO habíamos manejado en días anteriores, el secretario de gobierno, Ricardo Ahued Bardahuill, así como el subsecretario José Manuel Pozos Castro, están dándole a la gobernadora del Estado Norma Rocío Nahle García, excelentes resultados en materia política, que, en todo caso, es parte esencial de las actividades de ambos funcionarios dentro de la administración estatal. Se sabe que, en la secretaría de gobierno, se está dando el diálogo, un instrumento muy conocido por Ahued Bardahuill, para negociar y sacar adelante los problemas políticos y sociales a los que se enfrenta el nuevo gobierno.

Por su parte, Pozos Castro, quien tiene también una larga experiencia en el manejo político, hace excelente pareja con el secretario de gobierno, pues hay de por medio, buen entendimiento en este quehacer.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.