En los cafés políticos de la capital veracruzana, esta mañana no se habló de otra cosa más que de la lucha electoral municipal que se avecina y casi se da por hecho que en Xalapa no habrá alianza del PRIAN.

Y es que el PAN, según fuentes muy bien enteradas, ya decidió desde el Comité Municipal azul que para Xalapa su abanderada para la Alcaldía podría ser la exdiputada azul Maribel Ramírez Topete y ésta de inmediato les tomó la palabra y difundió de manera oficial su interés por encabezar esa candidatura.

Sin embargo, a nivel estatal no piensan igual, toda vez que Maribel si bien es nacida en Xalapa, no es de sangre azul; no pertenece a la casta divina del conservadurismo rancio, sino que trae ADN naranja, al que renunció apenas allá por el mes de abril del año pasado.

Es decir, aún le sale zumo de naranja por los poros y eso es algo que entre los azules no perdonan. Aunque hay que decir también que los Yunes del Estero no la ven con malos ojos y eso también cuenta.

Y por el lado del PRI sucede lo mismo, pues no pocos insisten en que el abanderado para ir por la alcaldía de Xalapa debe ser un priista de cepa como Américo Zúñiga Martínez, quien no lo hizo mal en su anterior administración. Es más, a él, el diputado Héctor Yunes lo alienta a que se lance al ruedo y tendría todo su apoyo. Pero contrario a lo que muchos piensan, Américo y su experiencia no lo ven así. Él piensa que para ganar Xalapa hace falta tejer una alianza opositora fuerte incluso con los 22 mil votos del Movimiento Ciudadano. El tema es que Dante Delgado, quien lejos de haber dejado el poder en el MC hoy es quien repartirá las candidaturas a nivel nacional (derecho que le da el ser el mandamás de la Comisión de Elecciones), sabemos que no quiere nada con el PRI. Aunque con Américo siempre la ha llevado bien y con él a la cabeza, pudiera armarse la polla, condición que parece indispensable para que Américo le vuelva a poner sus millones para competir por la alcaldía de Xalapa.

Y por el lado de MORENA al parecer todo se definirá entre Daniela Griego e Iván Martínez.

De quienes no se sabe, ni hay nada claro, es en quién podría ser el candidato del Movimiento Ciudadano puesto que su flamante dirigente estatal le tiene tanta fobia a los analistas políticos y a los medios de comunicación, que se la pasa encerrado en su oficina con 7 candados, además de obligar a su gente de prensa que no lo ponga en contacto con ningún medio o columnista.

Así, de Carbonel, nuevo dirigente estatal, no se sabe nada. Vaya, algunos ni su nombre saben, a diferencia de Sergio Gil Rullán que hizo crecer al MC por entrón, dinámico en las redes sociales, contestatario a las políticas públicas del partido en el poder y sobre todo decente y amable con los columnistas políticos.

Así es como ven hasta ahora el panorama local los sabios bebedores de café, quienes hoy le dedican los canillazos del día al oscuro y desconocido dirigente estatal del MC.

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