La noche de este miércoles, mientras los fanáticos futboleros se entretenían con los juegos de la Liga Mx, en los cafés de la capital veracruzana se platicaba y mucho acerca de un muy posible acuerdo de facto entre la mayoría de los priistas y la dirigencia estatal del Partido Movimiento Ciudadano. Lo anterior porque son muchos los priistas que están cansados con las imposiciones de su dirigente nacional, ‘Alito’ Moreno Cárdenas, y de tener una directiva local de papel.  

Los temas que dan origen a ese acuerdo de facto en Veracruz son dos, aparte del que ya se mencionó: 

1.- Los priistas no quieren, están hartos de que el diputado local Héctor Yunes Landa siga partiendo el pastel para su beneficio. Son muchos los que están hartos de que siga ocupando los cargos de elección popular por el PRI mientras se lleva los votos de sus seguidores de la asociaciones políticas hacia otros partidos. Estos priistas dicen ver claramente que la intención de Héctor es volver a ser diputado federal en el 2027 y luego candidato a la gubernatura de Veracruz en el 2030. 

2.- Esos mismos priistas han ido a tratar de convencer al actual alcalde de Orizaba, Juan Manuel Díez Francos, de que tome la batuta en el partido. 

3.- La idea de los priistas inconformes con el liderazgo nacional de ‘Alito’ (el cual aseguran que ejerce a nivel estatal no a través del dirigente estatal, Adolfo Ramírez Arana, sino de la diputada federal y Secretaria General del PRI, Lorena Piñón Rivera) es impulsar a Juan Manuel Diez Francos hacia un cargo de elección popular local o federal en el 2027 y luego formalizar una Alianza política PRI - Movimiento Ciudadano, para competirle a MORENA la gubernatura en el 2030. 

Se comenta también en los cafés que el próximo domingo en Orizaba, habrá una reunión privada entre los priistas inconformes y una élite de Movimiento Ciudadano, con el aún alcalde Juan Manuel Díez Francos. 

Esa estrategia se viene tejiendo pues los priistas ven que a sus directivos se les ha olvidado preparar sus cuadros para los próximos procesos electorales y de preparar el camino electoral para el 2027 y 2030, pues en el CEN, Alito Moreno anda más preocupado por no ser desaforado y evitar la cárcel, mientras que en el Comité Directivo Estatal quien decide en Veracruz anda más cerca a la pequeña comparsa que le sigue sus locuras al campechano Alito. 

¿Cómo la ven? Esta es una arista que no se veía en el horizonte político para cerrar la década, y que, de no cuajar, el PRI en Veracruz la pasará muy mal en lo que viene. 

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