Inocultable, aumentan hartazgo popular e inconformidad social, que hacen crecer a MORENA, como opción de gobierno viable.
Excesiva y perniciosa incorporación al circo político-electoral, y a su inagotable manipulación mediática, llena de distracción y entretenimiento, escándalos y “guerra de lodo”.
Desperdicio de tiempo y recursos públicos que deberían estar orientados a prioridades sociales. ¿Y las limitaciones y sacrificios de los veracruzanos cuándo se atenderán? ¿Qué se hace para enfrentar y resolver recesión o estancamiento económico, desempleo e informalidad creciente, más hambre y pobreza, inseguridad e inestabilidad? ¿Y los miles de millones de pesos desaparecidos, dónde están? ¿Cuál es el total-total de la deuda pública estatal y municipal?
Tsunami de preguntas sin respuesta.
Pobre Veracruz, cada día más pobre, supuestamente atendido por servidores públicos, funcionarios y gobernantes, muchos demasiado entretenidos en lo que más les ocupa y preocupa: mantenerse o alcanzar el poder, para beneficiarse y aprovecharse personal, familiarmente y en grupo, tanto de los recursos públicos, como de las atribuciones institucionales.
No pocos de ellos, dedicados ya, a “nadar de muertito”, a administrar las desgracias y sobrevivir manipulando el escándalo; eso sí, con expertos financieros y administradores aferrados a gastar más y endeudar más, total que paguen los que vienen.
Ante la falta de resultados positivos, el cambio no llega y los hechos muestran los alcances negativos de las obligaciones y promesas incumplidas.
Bien se sabe, que es difícil fortalecer el estado de derecho, con instituciones cada vez más debilitadas, socavadas y dañadas, que fácilmente caen en insuficiencia e ineficiencia, corrupción y delincuencia. El debilitamiento institucional es una realidad, de graves consecuencias.
LA UNIVERSIDAD QUE QUISO SER.
En este contexto, un amplio grupo de universitarios, se reúnen en Xalapa para recordar y valorar el esfuerzo realizado por Roberto Bravo Garzón, quien es historia en el servicio público, por su probada honestidad y capacidad, pero sobre todo por su don de gentes, por su hombría de bien.
Reuniones en donde amistad, gratitud y recuerdo predominan; y, en las que sobresale la leal y amorosa presencia de sus familiares. Destacándose siempre: Lety, Laura, Citlálic y Raul, dignos descendientes del Maestro Bravo.
Gracias a su invitación y de otros participantes, asistí al emotivo homenaje a su obra y persona, organizado por la asociación “Egresados Universidad Veracruzana” que preside Lulio Valenzuela.
Todos reunidos para recordar las mil y un anécdotas y hechos vividos con el Maestro. Así, escuchamos a Martha Moreno Luce, “Billy” Barclay, Miguel Álvarez, Enrique Levet , Angélica Gutiérrez y Gerardo Gallegos.
El ambiente se llenó por momentos de filosofía, derecho, arte, administración, contabilidad, economía, pedagogía, teatro, música, danza, pintura, matemáticas, física , química y deporte.
Breves y ejemplificadoras citas de los participantes, que llevaron a recordar hechos, esfuerzos y logros; y también, a valorar sueños y objetivos, a no olvidar ideales y pendientes.
Entre ellos, el de la Universidad que debe ser institución de solución y no reiterada posposición; oportunidad abierta y no garantizado rechazo; y a no ignorar, que presente negado es futuro cancelado.
Sin duda, en el citado homenaje todos aportaron inolvidables ejemplos y vivencias, unas y otras valiosas partes de ese gran legado. Pero además, palabras más palabras menos, llamó y llama la atención y trasciende, la evocación y referencias hechas por Enrique Levet , Miguel Álvarez y Angélica Gutiérrez y otros de los participantes, respecto a lo que avanzo y caracterizó a la UV en su tiempo; y que hoy sigue siendo una de las obligaciones ineludibles de la educación superior pública, reiteradamente apoyada y promovida por el Maestro Bravo: la descentralización como una de las formas de cumplir con hechos a jóvenes y adultos, que demandan educación superior.
Oportuno recordatorio, inteligente forma de actualizar y sumarse al merecido homenaje, que es responsabilizarse del presente y prever el futuro previsible.
Sin duda, ese impulso y legado es ejemplo y esperanza, que trasciende y persiste en la Universidad que quiere ser; que no se conforma y adapta a la mediocridad de la resignación y la adopción del rechazo como respuesta; y que insiste en poder ofrecer, oportuna y suficiente respuesta positiva, al derecho y aspiración a la educación superior.
Debilitamiento institucional, agravado por el persistente y notorio esfuerzo neoliberal de debilitar y destruir las expresiones del Estado de Bienestar; como las del garantizado acceso público y gratuito a servicios públicos de seguridad, movilidad, educación y salud.
Debilitamiento y falta de previsión propia, que ha llevado a la UV a la peor situación financiera de su historia, a pesar de la singular movilización en su defensa.
En fin por ahora, hágase extensivo el homenaje al Maestro, con cariño.
Son tiempos propicios, para empezar por recordar que en cuanto a la Universidad, es obligación permanente impulsar su fortalecimiento institucional interna y externamente; demandar al gobierno federal y al estatal el apoyo puntual necesario, así como la reparación efectiva del daño causado; y desde luego, identificar responsabilidades, fortalezas y debilidades propias, al propiciar e impulsar la evaluación y participación interna y externa.
Se otorga representación y poder oficial, para poder; se es servidor público para servir. ¿O qué?
*AcademicoIIESESUV@RafaelAriasH.Facebook:VeracruzHoydeRafaelAriasH |