PRIMERO LOS SERES HUMANOS.
Interesante resultó asistir, este jueves 5, a la conferencia “conoce el proyecto de nación, el proyecto de la esperanza”, convocada por MORENA a empresarios y otros invitados. Ahí estuvieron, entre varias organizaciones civiles, Cien por Veracruz y Parlamento Ciudadano.
Invitación para conocer las ideas centrales, a cargo del conocido empresario Alfonso Romo Garza, quien explico con brevedad y claridad, lo expuesto en gran parte, en “2018, la salida, decadencia y renacimiento de México”, último libro de Andrés Manuel López Obrador, quien también participó como conferencista.
Destacándose que ha encargado al mismo Alfonso Romo, coordinar su equipo de trabajo, para que “luego de consultar a integrantes de todos los sectores económicos y sociales, de la reflexión y el análisis, y con el método del diálogo circular y el consenso, se elabore el nuevo proyecto de nación 2018-2024”.
El líder nacional de MORENA insiste que “el renacimiento de México no es tarea de un solo hombre, sino de la suma de voluntades y de la responsabilidad de todas y de todos”.
Entre otros, de lo expuesto destacan temas como:
La construcción abierta del proyecto de nación, a partir de un análisis objetivo y actualizado, tanto sectorial y regional, como económico, político y social; así como, de un marco de principios y valores fundamental.
El método abierto y participativo, que convoca a todo el que quiera escuchar y dialogar, proponer y contribuir.
El reconocimiento e impulso a la participación social para que individuo y colectividad se organicen y contribuyan; para que ejerzan libertades y derechos, en la construcción o fortalecimiento de los ámbitos de gobierno, y así impulsar crecimiento económico y bienestar social, para todos.
Y el impostergable combate verdadero y permanente, a corrupción e impunidad gubernamentales, de “arriba para abajo.” Se sabe que corrupción sostiene al crimen.
En fin, más allá de las coincidencias y divergencias con MORENA, antes que todo, es preciso reconocer el esfuerzo por construir y fortalecer espacios propicios para el diálogo y el debate; así como privilegiar la búsqueda de soluciones y no la repetición e invención de más descalificaciones, entre los que piensan diferente.
Hay que aceptar y promover invitaciones para reunirse, a escuchar y preguntar, coincidir o diferir, pero en todo caso, conocer y valorar otras ideas, propuestas e iniciativas.
Entre otras razones, porque simple y sencillamente los problemas y su complejidad exigen soluciones, a partir de un esfuerzo colectivo mayor, de una auténtica concurrencia social plural.
Y desde luego, tener siempre presente, que ciudadanía y sociedad son la prioridad, origen y destino de toda política pública y acción del gobierno. Sin la legitimación suficiente y permanente, el gobierno no es representativo, ni aceptado; pudiendo llegar a convertirse en problema y obstáculo.
Intelectuales como Jürgen Haberman, han contribuido a desarrollar la Teoría de la legitimidad, destacan que entre otros aspectos hay que partir del simple hecho, de que todo gobierno debe ser aceptado y reconocido por individuo y sociedad; y que en una Democracia, además debe ser mayoritario el consenso que aprueba, permanentemente se califican todas las acciones gubernamentales, en un marco legal.
Gobierno representativo, eficaz, consensuado, evaluable y retroalimentable.
En fin, invitación abierta a informarse y escuchar, dialogar y deliberar para hacer Política de la buena.
*AcademicoIIESESUV
@RafaelAriasH
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