El 5 de enero habrá de inscribirse José Yunes Zorrilla como aspirante a la candidatura del PRI al gobierno de Veracruz. La convocatoria respectiva establece un lapso de dos horas (de las 11 de la mañana a la una de la tarde) para que cumpla con ese requisito.
Será el único que se registre. Este martes el senador Héctor Yunes Landa anticipó su declinación a través de un mensaje de Twitter: “@Pepe_Yunes será un buen candidato y un mejor Gobernador, como Veracruz lo necesita. Vamos juntos por Veracruz y por México. Nuestro proyecto sigue!”.
Ya desde la semana pasada, el viernes 22 de diciembre, el periodista Joaquín López Dóriga confirmó lo que muchos en Veracruz sabían: “De los pendientes, en Veracruz ya se decidió por José Yunes, no Héctor Yunes, cuyo primo Miguel Ángel Yunes Linares (es decir, Miguel Ángel Yunes Márquez), hijo del gobernador lo será de la alianza PAN-PRD; es decir, otro pleito en Veracruz entre los Yunes”.
La duda, sin embargo, persistía en la aldea, por la insistencia de Héctor Yunes de no “salirse de la fila”, y en muchas ocasiones se filtraron versiones en el sentido de que ya se había tomado una decisión en la capital del país y que sería Héctor el que tendría de competir por segunda vez.
Todos fueron “borregos”.
Pepe Yunes sabía que la voluntad en los más altos círculos del priismo nacional le favorecía, pero se mantenía expectante por la ausencia de señales hacia los priistas de Veracruz. Ortodoxo como siempre ha sido, Yunes Zorrilla no se lanzó a anunciar que sería él el candidato. Esperó a que se cubrieran las formas, que “alguien” desde el centro enviara los mensajes a las personas y los grupos adecuados.
Por la tarde, el dirigente nacional del PRI, Enrique Ochoa, confirmó lo que ya se escuchaba: Que el nuevo delegado de ese partido en Veracruz sería Fernando Moreno Peña, exgobernador de Colima y uno de los operadores más requeridos en temas sucesorios de las entidades federativas.
En su más reciente responsabilidad, como delegado en Chihuahua, al ser cuestionado sobre la calidad moral de los gobernantes emanados del PRI, respondió:
“El PRI no tiene el patrimonio de la corrupción. Esa no es una cualidad de los partidos, sino de los humanos, y eso se da lo mismo en el PRD que en el PAN o el PRI y en cualquier otro partido. No nos asumimos como representantes de la corrupción. Ahí está el caso de Guillermo Padrés (exgobernador del PAN en Sonora, encarcelado por lavado de dinero, defraudación fiscal equiparada y delincuencia organizada); también ya se les olvidó a ustedes, los medios, el tema de las ligas de René Bejarano y que su esposa es hoy coordinadora en el Senado. Se trata de un tema de individuos, no de partidos (...) Desafortunadamente se nos han juntado los casos de corrupción. El primer gobernador que fue llevado a la cárcel fue un priista, Andrés Granier (Tabasco), y lo metió Peña Nieto; no se nos puede criticar que la corrupción no se combate desde el Gobierno y el partido”.
Minutos más tarde se divulgó otro comunicado desde el Comité Nacional del PRI, en el que se confirmaba que Pepe Yunes sería “Precandidato de Unidad” en Veracruz.
Según dicho comunicado, Ochoa Reza afirmó que “José Yunes Zorrilla es el hombre indicado para dirigir el estado de Veracruz y llevarlo al siguiente nivel de desarrollo, para crear oportunidades de educación, salud y empleo para las mujeres, hombres y jóvenes de la entidad, y proporcionar bienestar y seguridad a la población. Pepe Yunes es la opción ganadora para Veracruz, por su trabajo constante en favor de las familias veracruzanas. Con Pepe Yunes vamos a ganar”.
El panorama, pues, está ya muy claro: La boleta para elegir gobernador llevará a Pepe Yunes, cobijado por el PRI y el PVEM; Miguel Ángel Yunes Márquez será abanderado por el PAN y el PRD, mientras que Cuitláhuac García tendrá el aval de Morena y el PT.
Nueva Alianza, Movimiento Ciudadano y Encuentro Social deberán definir en los próximos días si se suman a cualquiera de estos grupos, o van con candidato propio.
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Epílogo.
El chantaje emocional ha sido, desde hace tiempo, una herramienta muy socorrida por Miguel Ángel Yunes Linares. Pintó como héroe a Camilo Castagné Velasco (aquel Comisionado de la Policía Federal que fuera asesinado mientras comía en un restaurante de Cardel) y de paso se cubrió con la misma capa, asumiéndose como “defensor de los veracruzanos”. Por supuesto que nada mencionó de su fallida estrategia contra la violencia, ni de sus promesas incumplidas a los veracruzanos. Así es él. *** Si algún acuerdo hubo, este parece haber concluido. Miguel Ángel Yunes Linares anunció (¿o amenazó?) que habrá de expropiar predios que son propiedad del diputado federal Édgar Spinoso, o de familiares suyos, que se ubican en el trazo de la autopista Cardel-Nautla. El argumento del gobernador es que “exigen altos precios” por sus tierras y “se han negado a negociar”. Parafraseando aquella expresión de los jaliscienses: Yunes Linares nunca pierde… y cuando pierde, arrebata. *** Mil gracias a todos los que de las más diversas formas me han expresado su estima en los días recientes. De verdad: Hubiera querido que todos estuvieran conmigo. Los llevo en mi corazón.
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