Durante las casi dos horas que estuvo Cui en el asadero, pasó desapercibido para todos los comensales que se encontraban en esos momentos, de no ser porque a diferencia de que casi todos llevaban chamarras y abrigos de color oscuro, por el mendigo frío que estaba haciendo, el abanderado de MORENA lucía una chamarra de color fuicsita, con el nombre de ese partido.
No obstante que se supone que en las encuestas ese partido encabeza las preferencias electorales, durante el tiempo que estuvo ahí nadie se acercó a saludarlo, pedirle que se tomara la famosa selfies o cuando menos darle un saludito de lejos, lo cual habla de lo que ya se ha dicho en redes sociales, que el candidato -por segunda ocasión a la gubernatura- no cuenta con la popularidad necesaria.
Porque seguramente que de saber que ahí se encontraba el que en unos meses podría ser elegido gobernador del estado de Veracruz, no habría faltado alguien que además de querer tomarse la foto del recuerdo, hubiera aprovechado para pedirle algo.
De los dos acompañantes, a lo mejor eran dirigentes nacionales de MORENA que fueron enviados para asesorarlo en la campaña electoral, que supuestamente ya debe de estar estratégicamente planeada en todos los rincones del estado y no solo en restaurantes de la capital veracruzana.
¿Qué habría pasado si los que estaban ahí hubieran sido los otros candidatos a la gubernatura por el PAN y el PRI? ¿Habrían tenido mejor respuesta?
Terminando de comer, partieron Cui y sus acompañantes, sin mayores incidentes.
No habían pasado cinco minutos, cuando hicieron su aparición, partiendo plaza -como en los viejos tiempos- los tres dirigentes de la llamada Corriente Crítica del PRI, cual Reyes Magos que van a adorar al niño dios, primero entró Manuel Ramos Gurrión, seguido por Eduardo Thomae y al final Ricardo Olivares Pineda, ocuparon una mesa casi junto en donde estuvo “Cui” y sus adjuntos.
Los tres ex presidentes del Comité Directivo Estatal del PRI, del viejo PRI, remembraban aquellos triunfos cuando el partido era el invencible, cuando para ganar las elecciones, solamente se requería contar con el apoyo de la maquinaria partidista para resultar ganador.
Aquellos tiempos, cuando por ejemplo Ramos Gurrión y Eduardo Thomae fueron diputados federales por el mismo distrito de Orizaba, en donde también fue diputado Carlos Brito Gómez; en la XLIX Legislatura (1973 - 1976): Manuel Ramos Gurrión, en la L Legislatura (1976 - 1979): Eduardo Thomae Domínguez y en la LII Legislatura (1982 - 1985): Carlos Brito Gómez.
Aunque algunos políticos se cuestionan qué tanto podrán aportar en la actualidad, cuando la maquinaria de la aplanadora prácticamente ya no existe.
Habría que preguntar qué tanto contribuyen, para empezar, en el acto de este viernes en el registro como Pre Candidato de José Francisco Yunes Zorrilla "Pepe Yunes" en el Auditorio de Sección 32 del SNTE en Xalapa y el domingo en el inicio de Precampaña y visita del Precandidato a la Presidencia José Antonio Meade Kuribreña a las 12:00 horas en el World Trade Center de Boca del Río.
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