Hasta ahí todo iba bien.
El bochorno vino cuando frente a las narices del General Secretario pasó un taxi sin placas y nadie lo detuvo para revisión: “¿Y a esos vehículos sin placas no se les hacen nada?”, preguntó.
No, la verdad es que no les hacen nada.
Si el General supiera la cantidad de taxis que circulan en la entidad sin placas y con números clonados se iría de espaldas.
Algunos de estos taxis (no todos, felizmente) son utilizados para cometer ilícitos y como pudo constatar, transitan con entera libertad.
“Yo no sé si haya Tránsito aquí” preguntó el militar a Yunes Linares que en ese momento hizo como que le habló la virgen, por lo que uno de sus subalternos contestó: “Sí, si hay”; a lo que el General agregó: “Todos parejos con la ley”.
Ahí fue donde reaccionó el Gobernador que dijo a un ayudante: “¡Jaime!”. Y aunque no lo tomó la cámara, es evidente que el ayudante fue a buscar a Jaime Téllez Marie, el Secretario de Seguridad Pública, que tardó una eternidad en aparecer: “Jaime, revisión de taxis es obligatoria para todos, ahí dejaron pasar uno…”, le dijo Yunes Linares.
Este hecho, que pudiera ser para el anecdotario, no es un hecho menor. Y ojalá el General Secretario haya tomado nota de que no todos los que dicen hacerlo, luchan contra la inseguridad en Veracruz.
Pero mientras tanto, vaya bochorno.
Gato de Tarek pierde un pelo
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) embargó bienes por 500 millones de pesos al diputado federal Tarek Abdalá, como garantía de siete créditos fiscales por la cantidad de 500.6 millones de pesos, derivados de sanciones impuestas por la Auditoría Superior de la Federación.
Ignoro si el diputado tenga un gato de mascota, pero si es así, haz de cuenta lector que el minino perdió un pelo.
Tarek tiene pendiente una inhabilitación por 10 años para ocupar cargos públicos desde septiembre del 2016, año en que la Contraloría General del Estado lo acusó del desvío de recursos por 315 millones de pesos.
Esta inhabilitación aún no se lleva a cabo porque el legislador goza de fuero legislativo; fuero que se terminará el viernes 31 de agosto de este año.
Y hablando de fuero, desde enero del 2017 Tarek está sujeto a un proceso de desafuero solicitado por la Fiscalía General del Estado, quien lo acusa de un desvío por 23 mil 156 millones de pesos a su paso por la Secretaría de Finanzas.
Es casi seguro que no lo desafueren, pero a partir del 1 de septiembre, Tarek será un sujeto sin fuero y a expensas de la FGE que si lo detiene no lo dejará escapar.
Si prospera la acusación por el desvío de más de 23 mil millones de pesos, entonces su gato no habrá perdido un pelo. Se quedará calvo el pobre animal.
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