“El inminente exgobernador en menos de 90 días perdió el único activo que le quedaba, y era su palabra empeñada, ya que el Fiscal Jorge Winckler engaña al Gobernador de Veracruz. Arturo Bermúdez Zurita, Javier Duarte de Ochoa y Yo, fuimos parte de la propaganda electoral en la elección pasada a favor del candidato del PAN-PRD-MC, Miguel Ángel Yunes Márquez, y somos presos políticos por Desaparición Forzada”.
Hasta ahí la carta que comenta Fili en su columna.
Tengo mis dudas sobre su autenticidad, entre otras cosas, porque Bravo Contreras tiene los recursos económicos suficientes como para publicarla en un medio de difusión nacional que en automático la subiría a su portal de internet para ser leída por el mayor número de personas.
Y en cuanto a su contenido tengo mis reservas por la mala sintaxis, pero los argumentos sugieren que pudo haber sido escrita por el ex Fiscal.
De todos es sabido que si Luis Ángel presentó su renuncia a la FGE fue porque hubo un pacto con el gobernador entrante, Miguel Ángel Yunes. Estoy seguro que Yunes le dijo, “di todo lo que sepas y no habrá bronca contigo”.
Que Yunes haya incumplido su palabra no extraña a nadie. Si por algo está hecha talco su reputación es porque no acostumbra a cumplir sus promesas.
Pero de eso a que esté acusando al ex Fiscal de desaparición forzada hay un trecho muy grande. Por este delito lo acusan los familiares de los desaparecidos desde antes de que dejara la FGE. Y también señalan a Bermúdez Zurita y a Javier Duarte.
Ni Luis Ángel, ni Javier, ni Arturo son presos políticos. Para la sociedad que los padeció son unos consumados ladrones que robaron a su antojo y abusaron de su poder cuantas veces quisieron.
Los tres están señalados de cometer el delito de desaparición forzada entre 2010 y 2016. ¿Qué tanta responsabilidad tiene? Eso lo decidirá un juez.
Ahora, de que hubo un pacto Yunes-Bravo, eso que ni qué. Es lo que se acostumbra entre servidores públicos deshonestos y bandidos. Pero independientemente de eso los tres (Duarte, Bermúdez y Bravo) tendrán que responder por un delito de lesa humanidad hasta que quede totalmente aclarado, porque las víctimas no desaparecieron solas.
Y a partir del 2 de diciembre tanto Yunes Linares como Jorge Winckler deberán responder por las desapariciones ocurridas en este bienio. Al menos 25 de acuerdo con datos aportados por los Colectivos de búsqueda.
En síntesis, a ambos también les lloverá en la milpa. Y ni todos los desplantes del gobernador, ni los desdenes del Fiscal, serán patente de corso para que evadan a la justicia.
bernardogup@hotmail.com
|