Sin embargo, a Rubén Cortés no le pareció (y desde luego a mi tampoco) que esta señora además de prepotente y abusiva se vaya así nada más por algo circunstancial y anecdótico, sin rendir cuentas por el daño tan grande que le hizo a la dependencia y al medio ambiente del país.
Comentó Rubén Cortés que en el corto tiempo que Josefa estuvo al frente de la dependencia despidió a 16 mil trabajadores en todos los niveles, entre sindicalizados y de confianza, y con esas formar trogloditas retacó de expedientes de demandas laborales las oficinas de la Secretaría del Trabajo.
Además, el periodista apuntó que doña Josefa también cayó en actos de corrupción, pues la omisión también lo es; cuando por desconocimiento o el afán de ahorrar recursos como parte de la ‘Austeridad Franciscana’, no contrató a los trabajadores eventuales como por años se había hecho para prevenir incendios en el país.
Cientos de trabajadores eventuales recorrían las zonas boscosas y detectaban, por ejemplo, entre otros elementos de propagación de fuegos pequeños pedazos de vidrio que mediante el efecto lupa, los rayos del sol inician pequeños incendios que al ser detectados a tiempo por este tipo de trabajadores impedían grandes y lacerantes conflagraciones.
Pues esta santa señora no le vio utilidad a este tipo de trabajadores ‘que no hacían nada’ y no los contrató, dejando en su corto paso por la administración un récord histórico de incendios por todo el país.
Las dos cuestiones mencionadas hubieran sido suficientes para que se le hubiera pedido su renuncia y se le hubieran fincado responsabilidades, sin embargo, corrió con toda la suerte del mundo y hoy debe estar feliz y libre de tanta presión de haber estado en una de las áreas más sensibles del gabinete.
Es decir, hay funcionarios públicos que tienen más suerte y vidas que los gatos.
Casos como el del extitular de la SEDECOP en Veracruz y la extitular de SEMARNAT, no se dan con frecuencia, pero se dan.
A Ernesto Pérez Astorga le vino como anillo al dedo el movimiento que llevó al Senador Ricardo Ahued Bardauil a la Dirección de Aduanas, pues en unas cuantas horas estará ‘defendiendo’ los intereses de Veracruz en el Senado de la República.
Pérez Astorga estaba en la mira del Gobernador Cuitláhuac García Jiménez y del titular de la Secretaría de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, para darle aire a más tardar en junio o julio. Sus números eran de los peores en el Gabinete. Las evaluaciones internas que se realizan por órdenes del gobernador lo ubicaban en la cola de la lista. Jamás le encontró la cuadratura al círculo en la dependencia. Al interior los subsecretarios le obedecían poco y sus áreas operativas se pasaban días sin tener quehacer. Pero eso sí, la SEDECOP era de las dependencias que más han gastado en viáticos y gastos en servicios generales.
No pocos aseguran que las circunstancias y la suerte de Pérez Astorga le ahorró al gobernador la pena de darle las gracias y enviarlo a su casa o a despachar en sus negocios particulares.
En fin, de que hay gente con suerte… la hay.
@frlicona |
