“El gobernante está expuesto al negocio de la prensa amarilla, mezcla de extorsión, conventillo y escándalo”
No…no se trata de los 49 de San Francisco, los mismos que ganaron cinco campeonatos de Súper Bowl en tan sólo 14 años entre las temporadas 1981y 1994, cuatro de ellos en la década de 1980, el de Joe Montana…se trata de nuestros primeros 49 años que orgullosamente lo platicamos…
Quizás pecando de vanidosos, con el orgullo además, me levanté a las cinco de la mañana, lo confieso, apenas a las dos de la madrugada me estaba acostando…pero los recuerdos llevados fiel y sagradamente en la mente, me hicieron levantarme para escribirles a mis cuantos lectores, dos, tres, cuatro…para comentarles que este día estoy cumpliendo 49 años en esta mágica actividad en donde los enemigos gratuitos aparecen, curiosamente, dentro de las mismas filas del periodismo…más contras que en la clase política que ya es mucho decirlo.
Hablamos de 49 años en este trabajo, pero sinceramente ya estamos en más de 53 años en actividad de la reporteada, tomando en cuenta que nuestros primitivos escritos se publicaban en El Dictámen de los Malpica, de Veracruz y en el vespertino La Tarde de esta misma familia de periodistas…trabajos de la Facultad que tenían la obligación de su publicación, si el reto estaba superado…lo logramos continuamente.
Quién de nuestra camada debe recordar aquel remate de cabeza de Horacio López Salgado, en el juego inaugural de México contra la Unión Soviética, el grito de 104 mil asistentes, testigos y parte de la rechifla al entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz, desde el palco de prensa, impresionado por tanto atrevimiento de ser parte de un lugar considerado imposible, escuchando en la cabina al cornista deportista de Radio Caracol de Colombia que nos invitaba a dar nuestra opinión…tantas anécdotas y aquí seguimos marcando la enseñanza de grandes maestros, las palabras de don José Pagés Llergo cuando se refiere a la llegada de dos caminos, al sitio exacto donde se bifurcan, es cuando se analiza el provenir de nosotros como periodistas:
“…dos rumbos opuestos se tienden en la distancia de sus vidas y a partir de ahora habrán de meditar, si no lo han hecho todavía, cuál de ellos habrán de seguir…
Uno es blando y suave y conduce al disfrute de una vida cómoda. Para seguirlo basta con cerrar los ojos a la realidad, los oídos al clamor débil y la boca para acallar los gritos de la propia conciencia…”
Intentamos cumplir dentro de la ética que nos enseñaron en la Facultad y los principios conservados desde la familia, de la honestidad y responsabilidad, leyendo continuamente el mensaje del entonces Director de la Revista “Siempre”…
“…el otro camino es más largo y más lleno de obstáculos y de peligros. Habrá que recorrerlo desnudo de ambiciones pero abrigado de responsabilidades, y al fin de la jornada, ya maltrechos y decepcionados, hallaremos como recompensa una pobreza digna y la sentencia de una voz mágica que nos dirá con la fatalidad del oráculo, si supimos cumplir como hombres, como mexicanos y como periodistas”.
Hicimos un compromiso sin claudicaciones, desde hace más de 50 años e intentamos cumplirlo, sin fijarnos en el chantaje y el soborno de quienes entorpecen esta labor, quizás como lo dijera el mensaje de José Pagés Llergo…”oscilamos entre el halago abyecto y la censura irresponsable. Lejos de la serenidad y el análisis, es la pasión la que mueve nuestras plumas. Convertimos a los enanos en gigantes, o movidos por el rencor y la envidia destruimos honras, negamos el talento, ofendemos la belleza y aplastamos la capacidad. La crítica, llevada a este extremo, no sólo pierde su eficacia sino que se convierte en crimen porque se pone al servicio de los más bajos instintos, porque sólo responde a lo negativo de nuestra conciencia y en el mejor de los casos, al interés de la antipatria”.
Con fallas y errores, pero sin mala intención o “mala leche”, seguiremos imponiendo el criterio profesional y en la búsqueda de la verdad, en estos momentos de fenómenos de angustia y de falsos periodistas que escriben palabras muertas, afortunadamente, con la fuerza y la necesidad de contribuir al fortalecimiento del verdadero periodismo que logrará entre otros metas, mejorar la democracia muy lejos de las trampas de la manipulación…
Remato esta columna, mencionando el desempeño de una extraordinaria selección de fútbol, en la Novena Copa Mundial, coronada en México 70, Brasil que llevando como director técnico a Mario Lobo Zagallo, se la rifó – así quien no, abrón – con cinco dieces, es decir, Jairzinho, Gérson, Tostao, Rivelino y no manches, Pelé jugando por donde se le pegó la gana, siempre eficiente y anotador de goles.
Así se escribe la historia…así festejaré hoy los primeros 49 años en esta profesión…
¡¡ Salud…!! |