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Fuentes de la Fiscalía General de la República (FGR) informaron que fue reactivada una investigación por enriquecimiento ilícito en contra de Jesús Villalobos López.
La vinculación de este personaje con Miguel Ángel Yunes Linares es inocultable.
De hecho el entonces gobernador de Veracruz la presumió a los veracruzanos, en una visita y paseo por centro de Xalapa, unas semanas después de haber tomado posesión de su bienio.
Pero su relación –y sus complicidades- se hizo evidente durante los gobiernos federales encabezados por los panistas Vicente Fox y Felipe Calderón.
En 2006 Yunes Linares fue secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en tanto que Jesús Villalobos López (sobrino, por cierto, del secretario de Salud en la administración foxista, José Ángel Córdoba Villalobos) era su Director de Administración.
En diciembre del mismo año, una vez que tomó posesión Felipe Calderón, los dos personajes pasaron al ISSSTE, Yunes como director general y Villalobos como Director de Finanzas.
Cuando Miguel Ángel Yunes dejó la Dirección del ISSSTE en 2010 para competir por la gubernatura de Veracruz (campaña en la que fue derrotado por Javier Duarte) Jesús Villalobos López se convirtió en Director del ISSSTE, en sustitución de María del Rosario de León García.
Más adelante, Villalobos López ocupó la Dirección de Pronósticos Deportivos para la Asistencia Pública y nombró a María del Rosario de León García como subdirectora General de Ventas de Pronósticos Deportivos.
Se sabe que en el gobierno de dos años de Miguel Ángel Yunes Linares, Jesús Villalobos se convirtió en un “ministro sin cartera” y tuvo como encomienda la renegociación de la deuda del Estado, que le dejó jugosos dividendos a la familia en el Poder.
La carpeta de investigación que reactivó la FGR en contra de Jesús Villalobos deriva de un procedimiento de verificación patrimonial de la Secretaría de la Función Pública (SFP) en el que se detectó que en los años 2002, 2003, 2005, 2006, 2007 y 2011, Villalobos registró un incremento en su patrimonio “que no resultaba explicable o justificable”.
La SFP lo denunció el 7 de julio de 2017, lo que dio lugar a la carpeta de investigación FED/SEIDF/CGU-CDMX/000173/2017; sin embargo, la denuncia no fue ratificada sino hasta el 25 de julio del 2019, dos años más tarde.
En diciembre del año pasado, un juez de control del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur ordenó a la FGR emitir, en un plazo de 15 días, un citatorio para interrogar al exfuncionario en calidad de imputado y hacerle de su conocimiento la investigación que obra en su contra.
La SFP presentó un amparo contra esa decisión judicial y, aunque inicialmente fue desechado, un tribunal ordenó su admisión. El fallo aún está pendiente.
En el último día del sexenio de Felipe Calderón, la SFP inhabilitó a Villalobos por un periodo de 10 años para desempeñar cualquier cargo público y le impuso el pago de una multa de 161 mil 759 pesos.
La sanción fue dictada porque se descubrió que el 05 de febrero de 2012, con recursos de Pronósticos Deportivos, se llevó a 20 invitados a ver el Super Bowl entre los Patriotas de Nueva Inglaterra y los Gigantes de Nueva York, en Indianapolis. Gastó más de 250 mil dólares.
De su paso por el ISSSTE, además, se detectó que ocasionó un daño patrimonial al organismo por 300 millones de pesos. Siendo director de finanzas (y Yunes Linares su jefe) otorgó contratos a empresas que no cumplieron ningún servicio.
La FGR empezó a jalar el hilo de una madeja en la que Miguel Ángel Yunes Linares está involucrado.
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Epílogo.
Mientras el ahora exdiputado, Érik Aguilar López, se ausentaba de la audiencia a la que fue citado para revisar su caso, un hermano suyo, Alfonso Aguilar, fue detenido en cumplimiento de una orden de aprehensión emitida en su contra desde 2012, por apoderarse de bienes inmuebles ajenos, planear el ilícito y e inducir a otras personas a cometerlo. *** Una buena noticia: El subsecretario fderal de Salud, Hugo López-Gatell, informó que hasta el momento no se tiene considerado cancelar eventos masivos en el país como medida preventiva contra el coronavirus. Apenas la semana pasada en reunión con los 32 secretarios de salud de los estados y el titular de la dependencia federal acordaron identificar todos los eventos masivos que están programados en 2020 y acentuar las medidas de control. ¿Qué quiere decir esto? Que la Cumbre Tajín, a celebrarse este mes, no será cancelada.
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