Prefacio.

Se le podrán cuestionar muchas cosas al actual dirigente estatal del PRI, Marlon Ramírez Marín, pero nunca que no acompañe sus críticas, sus señalamientos, con propuestas concretas. Esto es lo que en buen español se conoce como “crítica constructiva”. *** Este lunes el dirigente priista se pronunció a favor de que se destinen recursos para el funcionamiento de la Fiscalía Especializada en Feminicidio y Violencia de Género, pero además se dijo “a favor de todas las acciones en combate a la violencia en contra de las mujeres y que generen mejores condiciones de vida”. *** En conferencia de prensa, en la que estuvo acompañado por la secretaria general del PRI en la entidad, Arianna Ángeles Aguirre; por la presidenta del organismo partidista de mujeres (ONMPRI) en Veracruz, Yolanda Lagunes López, y de la presidenta de la Fundación Colosio, Zaida Lladó, Marlon Ramírez anunció que analizan la emisión de un exhorto en el Congreso del Estado, con el apoyo de las legisladoras, para buscar la asignación de mayores recursos para la Fiscalía y dotarla de infraestructura, capacitación, atención y todo lo necesario para su operación, luego de que fuera aprobada su creación, pero sin que se contemplara partida presupuestal. *** Arianna Ángeles Aguirre dio a conocer que el 7 de marzo se presentará la conferencia “Liderazgo Político de las Mujeres”, impartida la senadora Beatriz Paredes, y además se instalarán mesas de trabajo para desarrollar temas como: violencia contra la mujer, igualdad sustantiva, nuevas masculinidades, salud, economía y trabajo, mujeres rurales y mujeres indígenas. *** Marlon Ramírez Marín puntualizó que el tema de violencia contra la mujer no le compete a una sola instancia: “nos compete a todos”.

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La confabulación es evidente… y hasta burda.

En su afán por evadir la acción de la justicia, el exfiscal general de Veracruz, Jorge Winckler Ortiz, y su cómplice, el exfiscal anticorrupción, Marcos Even Torres, fabricaron pruebas, inventaron documentos y respaldaron todo con la “certificación” de un notario público, casualmente del estado de Oaxaca… coincidentemente llamado Jorge Winckler Yessín.

Sí, el padre del fiscal suspendido de su cargo y prófugo de la justicia.

Francisco Zárate Aviña, quien denunciara a ambos exservidores públicos de Veracruz (lo mismo que al fiscal Eduardo Coronel Gamboa) por el delito de desaparición forzada, presentó ahora una denuncia penal en contra del notario público número 35 del estado de Oaxaca, Jorge Winckler Yessin, por los delitos de falsificación de documentos y contra la fe pública.

Resulta que en la demanda de amparo 896/2019 del exfiscal anticorrupción, Marcos Even Torres, la Fiscalía General del Estado (FGE) promovió un incidente por falsificación de firmas, en referencia específica a la plasmada en el escrito inicial para solicitar dicha suspensión.

Para rebatir tal afirmación, Marcos Even Torres presentó una certificación notarial fechada el 09 de diciembre del 2019 y firmada por el notario Jorge Winckler Yessin, quien señala en el documento que Marcos Even Torres compareció ante él y que él mismo se cercioró de su identidad.

Para el momento en el que Marcos Even Torres tramitó esa certificación ya tenía la calidad de prófugo de la justicia, lo que fue ampliamente difundido en medios de comunicación, pero –además- el notario público conocía de estos hechos, pues otro que estaba evadido de la justicia era su hijo, Jorge Winckler Ortiz.

En la denuncia presentada por Francisco Zárate Aviña, se señala además a los abogados autorizados por Marcos Even Torres, que son Flor de María Valverde del Río -esposa del exfiscal Jorge Winckler-, Monica Edith Huber Zarate, Eudar Escobar Elias y Jorge Eduardo Winckler Ortiz.

En su calidad de prófugos, Jorge Winckler y Marcos Even Torres son hoy nocivos para todos aquellos con quienes tengan tratos.

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Epílogo.

Las formas son distintas y nos tendremos que acostumbrar al “estilo Morena” de gobernar. El martes 18 de febrero, de forma intempestiva, sin avisarle a la titular, el gobernador Cuitláhuac García hizo acto de presencia en las instalaciones del DIF estatal y le dio posesión a Corina García Moyano como directora de administración en esa dependencia. *** Desde ese momento la directora general, Verónica Aguilera Tapia, debió entender que le correspondía darle las gracias al mandatario estatal y dejar el cargo que le consiguió su socio y amigo, el panista redimido Oscar Lara Hernández, hoy refugiado en las ruinas del World Trade Center de Boca del Río. *** Pero Verónica Aguilera no entendió que su ciclo había concluido. Creyó que se trataba sólo de “un calambre” y buscó emisarios para componer su relación con el gobernador. No se enteró de que su renuncia ya estaba en el escritorio del secretario de Gobierno, Éric Cisneros, en espera del “mejor momento” para hacerla efectiva. *** Eso sucedió cuando el gobernador aprobó la propuesta del propio secretario de Gobierno para ocupar el cargo: Una más de sus colaboradoras, Rebeca Quintanar Barceló, quien se desempeñaba como coordinadora de Promoción de Valores Cívicos y Culturales. *** Hay muchas versiones acerca de los verdaderos motivos de la salida de Verónica Aguilera. Casi todas coinciden en los malos manejos administrativos que, incluso, podrían provocar que la hoy exfuncionaria tuviera que enfrentar a la justicia. *** Son otros modos.

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