En la actual disputa política por el puerto de Coatzacoalcos, donde cabe destacar que el partido MORENA arrasó por doblete en las últimas dos elecciones, se encuentran algunos actores políticos con pasado incómodo, lo que muy probable les reste puntos rumbo a la jornada electoral de junio próximo.
El PAN, partido que en las últimas elecciones no ha pasado de 20 mil votos promedio en el municipio de Coatzacoalcos, a comparación del Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) que en la última jornada electoral (Elección Gobernador 2017) obtuvo cerca de 70 mil sufragios, o de la coalición PRI-VERDE que obtuvo 25 mil votos, pone a Acción Nacional frente a un gran reto político, que un mes de campaña será poco tiempo para lograr aumentar su votación.
Jesús Moreno Delgado, o como él mismo se ha presentado durante esta campaña: Chucho Moreno; es quien abandera la candidatura de la Coalición PAN-PRD en este municipio porteño, el cual durante esta mitad de campaña que llevamos de avance, ha tratado, con esfuerzo, alcanzar la segunda posición en preferencias electorales que ocupa el priísta Carlos Vasconcelos, quedándose limitado.
Son pocos los ciudadanos que verdaderamente recuerdan quien es Chucho Moreno, y ante ello me he tomado el tiempo para escribir e informar a mis paisanos de Coatza, quienes son los que hoy buscan gobernar este municipio.
Chucho Moreno no nace de la nada, y mucho menos nace dentro del PAN o PRD, sino todo lo contrario. Nace en el PRI, en la etapa, quizá, más álgida en Coatzacoalcos, cuando el priísmo “arrasaba las preferencias electorales” mediante artimañas. Su desempeño siempre fue dentro de las campañas electorales del tricolor, que como sabemos se dedicaban a lucrar con la pobreza de sectores lastimados, entregando dádivas y migajas, láminas y cemento, a cambio del voto o credencial de elector, práctica que todos ya conocemos y que en lo actual despreciamos.
Quienes llegaron a gobernar Coatzacoalcos en esta mencionada etapa del priísmo, llegaron sólo a enriquecerse de dinero público, y a diferencia de los tiempos de campaña, se olvidan del pueblo. Las promesas hechas en época electoral se esfumaban arrastradas por el viento.
Recordamos así, a Marcelo Montiel (2001-04), gobierno municipal que inició con los estudios para la viabilidad de la Cosntrucción del Túnel Sumergido; Rafael Anaya Mortera, quien en el 2004 suplió por meses a Montiel Montiel; Iván Hillman Chapoy (2005-07) quien como resultado de su pésima administración municipal perdió las elecciones siguientes para Diputado; Marcel Montiel Montiel (2008-10), que por segunda ocasión se convertía en Alcalde, continuando con la misma política criticada; Marcos Theurel Cotero (2011-13), quien en el 2010 mediante una campaña publicitaria masiva y la compra del voto
logró el triunfo a la par con el exgobernador Javier Duarte; y Joaquín Caballero Rosiñol (2014-2017), actual alcalde que con triquiñuelas obtuvo la mayoría de votos, siendo mejor conocido como el Alcalde de las obras inconclusas y los pozos de agua salada.
En las administraciones anteriores mencionadas, estuvo presente quien hoy se pinta de azul y busca ser Presidente Municipal de Coatzacoalcos, Chucho Moreno, en particular en el gobierno priísta de Caballero Rosiñol, donde hasta hace un par de meses laboraba como el Director del DIF municipal.
Convirtiéndose no sólo en un operador priísta más, sino en brazo aliado de Marcelo Montiel Montiel, quien fue dos veces alcalde y dejó vacíos en las finanzas municipales de Coatzacoalcos. Haciendo y deshaciendo, Jesús Moreno, a su antojo con la venia de Montiel en el municipio.
Recordemos que Marcelo Montiel, al igual de Hillman Chapoy, pasaron a la historia como dos de los pésimos alcaldes en la historia de Coatzacoalcos. Incluso Montiel Montiel, cuando fue nombrado como delegado de la SEDESOL, resultó acusado de malversar recursos públicos, de lucrar con los programas sociales, de ser parte de los “ladrones de elecciones”, enfrentando el escándalo y caos.
Como buen aprendiz de la vieja escuela, Chucho Moreno, a su paso por la dirección del DIF municipal también cargó con varios señalamientos, propios que el periodista Mussio Cardenas describió así:
“Negligente, omiso, irresponsable, Jesús Moreno Delgado atestó de defraudadores el DIF de Coatzacoalcos sin siquiera verificar que sus cédulas profesionales fueran auténticas.” Además, añadió respecto a su función como director: “Su corte es fraudulenta, tramposa, ventajosa, voraz, con salarios faraónicos hasta el exceso de cobrar lo que ni un regidor imagina, menos los funcionarios de otras áreas, los preferidos del joaquinismo que palidecen ante el sueldo de la secretaria del director del DIF.
Hijo de tigre, pintito, dicen por ahí. Así como bien decía mi abuelo: “El que con lobos anda, a aullar aprende”. Vaya que el actual candidato del PAN-PRD aprendió a aullar; un candidato de cuna y pesebre marcelista: vieja, fea y repugnante forma de hacer política.
Y tú, ¿Comprarás el cuento del lobo disfrazado de oveja? |
