Los sabios de la política ven muy mal que haya alcaldes que ven el temblor y no se arrodillan. La inmensa mayoría ha hecho un papelazo, no han hecho obras, están hasta el ojo de deudas y con millonarios laudos laborales sin liquidar. La inseguridad, violencia, marginación y delincuencia, agobian sus parcelas, y a pesar de todo, riegan dinero y se mueven políticamente para dejar a un sucesor a modo en el 2017. Quizá esa aspiración sea hasta legítima, pero los que de plano se pasan son aquellos que quieren dejar a sus esposas en el cargo… Por otra parte, los sabios bebedores de café también desayunan, y a muchos extraña que los señores magistrados que comparten los sagrados alimentos todos los martes en La Gavia, no hayan invitado aún a Paco Portilla a que goce con ellos de esa buena costumbre… A propósito de La Gavia, por ahí se les vio esta mañana a Gustavo Adolfo Murrieta, ex subsecretario de la SEDECOP; a Renato Alarcón Guevara, delegado federal del ISSSTE; al diputado Paco Garrido; al alcalde de Acayucan, Marco Antonio Martínez Amador; el delegado federal de CORETT, Hiram Emmanuel Jerezano; al hombre de las confianzas de Alberto Sosa en el Tribunal, Carlos Hernández; a los magistrados Marco Antonio Lezama Moo y Alfredo Algarín Vega; y hasta el Procurador Fiscal, Javier Yáñez Vásquez, hombre serio y comprometido quien se ha rodeado en la Procuraduría de gente muy capaz como el abogado Felipe Marín Carreón… Canillazos para los alcaldes maletas que quieren heredar el hueso, y lecheros para los políticos que entienden que en las comidas y cafés se cierran los mejores tratos. |