El tema se resiente más entre las aspirantes e invitadas mujeres que habiendo aceptado se bajaron por temor a que se rompiera la estabilidad en sus hogares.
Lo peor, se comentó en las mesas del café, es que en el OPLE están enterados de estas situaciones y no han hecho nada por llevar estos temas al debate ni lo han denunciado para que las autoridades competentes intervengan.
‘Los del OPLE se están prestando al juego sucio de caciques políticos regionales’.
Canillazos para quienes se sienten dueños de los cargos de elección popular y para quienes lo están solapando. |