- Y tiene mucha razón, puesto que ambos hacen el mismo daño a la administración y la misma merma al erario público.
Sin embargo, lo hemos señalado en no pocas ocasiones en este mismo espacio, el principal problema en muchas de las áreas del Ayuntamiento xalapeño y el dolor de cabeza que han tenido anteriores alcaldes -y Ricardo lo debe saber muy bien, pues ya fue alcalde de Xalapa- es en gran parte del personal sindicalizado; en CMAS, sobre todo, saben mucho de ello-.
El tema es que si Ricardo Ahued no mete orden también a muchos de su personal sindicalizado, al final lo van a traicionar y harán que falte a muchos de sus compromisos torales de campaña. Así, Ahued no resolverá el problema de raíz, pues allí es donde realmente se encuentra el monstruo de mil cabezas que socava los recursos públicos y con su bajo rendimiento vuelve -cuando quieren- reumático el servicio público.
Ricardo Ahued fue muy puntual al señalar que fueron “50 personas de confianza”… o sea, que se metió con los que no pueden reclamar y que, aunque no lo crea, son los menos en las plantillas laborales.
El anterior alcalde, Hipólito Rodríguez Herrero, en las postrimerías de su administración no tuvo empacho en declarar a Política al Día que el verdadero problema de CMAS y de la administración de Xalapa son los sindicatos, pues estos tuvieron siempre secuestrado al ayuntamiento.
Hasta ahorita, Ricardo Ahued se la ha llevado nadando de a muertito con los sindicatos y antes de confrontarlos, los ha apapachado, pero si no se hacen las limpias suficientes todo seguirá igual… será el mismo infierno solo que con diferente diablo.
¿Quiere Ricardo Ahued resolver en verdad el problema laboral en Xalapa? Le apostamos doble contra sencillo que en cualquier auditoría somera pero honesta, saldrían no 50, sino cientos de empleados sindicalizados que no hacen nada o hacen tan poco que no justifican su permanencia en el Ayuntamiento de Xalapa.
Eso sí, también es importante destacarlo y reconocerlo, no todo el personal sindicalizado es igual, pues hay muchos que sienten amor a la camiseta y son por demás responsables… pero aquí no se dice que quiten a todos, solo a los tomates podridos.
Una criba o una limpia entre el personal sindicalizado daría a Ricardo Ahued el reconocimiento público. | 
