No obstante, la Refinería de Dos Bocas no es cosa sencilla. Diría AMLO, no son tamales de chipilín. Es uno de los proyectos insignias del Presidente, y Rocío Nahle (o cualquiera que estuviera en su lugar) debe saber que sin A no hay B, y que su candidatura pasa forzosamente por la producción de combustible en Dos Bocas.
La inauguración de la fase de construcción fue a todas luces para ganar tiempo y acaparar reflectores. Pero mientras Dos Bocas no produzca combustibles, el Jesús lo tendrá en la boca Rocío. Solo entonces, cuando comience a producir Dos Bocas, Rocío Nahle podrá dedicarse a hacer presencia en Veracruz.
Desde hace ya varios meses, altos mandos de MORENA en Veracruz aseguran que Rocío Nahle va y que bajará en breve. Pero el tiempo corre y cada día de ausencia es terreno fértil para la rumorología.
¿Hay tiempo? Se debe recordar que antes de su campaña para el Senado, Rocío Nahle tampoco tenía presencia en el Estado y al final, su triunfo fue contundente en mancuerna con Ricardo Ahued. Por lo que más valdría buscar otras señales, porque hoy, cuando menos hoy, no hay autoridad política o de gobierno en Veracruz que haya dado un viraje y haya abandonado el proyecto.
Así, el 1o de julio de este 2023, fecha promesa dada este lunes por Rocío Nahle para el inicio de la producción de combustibles en Dos Bocas, podría marcar el inicio de su aterrizaje en Veracruz.
Que no le extrañe que por un lado sale el primer barril de combustible, y por otro ella sale disparada a Veracruz.
A partir de allí, ahí sí, si las intenciones de Rocío Nahle son gobernar Veracruz, se dejará ver y alcanzar por los veracruzanos.
Falta poco para que las señales sean más claras, y aún queda tiempo suficiente.
@AtticussLicona
(COLUMNA "POLÍTICA AL DÍA") |