Es por eso que a dicha empresa que vino con Yunes ya no le renovaron contrato y al parecer va para investigación.
Disequi, de acuerdo a los datos, es una empresa con sede en el parque Industrial San Antonio Buenavista, en Toluca, Estado de México.
En la página de la Secretaría de Salud aparecen al menos dos contratos firmados por una vigencia de mayo a diciembre, tanto de 2017 como de 2018, y el representante legal de la empresa aparece como Arturo González Meléndez. Quien firma como representante de la dependencia es Miguel Ángel García Ramírez, en su carácter de director administrativo.
El objeto de la contratación en ambos periodos es la "prestación de servicio integral de pruebas de laboratorio clínico para los hospitales y Centros de Salud pertenecientes a Servicios de Salud de Veracruz".
¿Las cifras? En ambos contratos de 2017 y 2018, se estipula que un importe máximo de más de 300 millones de pesos. Es decir, en dos años, Disequi se habría llevado 600 millones de pesos.
Y ni con ese mundo de dinero parece que pudieron comprar enfriadores clínicos de alto nivel, y parece que el asunto en la Secretaría de Salud va por el mismo rumbo en el Duartismo: con contratos irregulares que pusieron en riesgo vidas.
@pablojair |