Como aquí se acostumbra en México, chivo brincado - chivo pagado, a las primeras declaraciones comprometedoras de Lozoya, un juez federal le otorgó su amparo largamente esperado, según declaraciones del abogado José Óscar Valdez, doctor en derecho Constitucional. El abogado ha explicado que el amparo le fue otorgado por la prescripción de los delitos vinculados a la brasileña.
Así que a Lozoya solo le quedan pendientes de defender en juicio las acusaciones por los presuntos delitos de Agro Nitrogenados y la compra de un astillero. Ahí la lleva. Y esto será así porque a Lozoya se le dio el tratamiento jurídico de ‘Testigo colaborador’, que en términos teóricos es un ‘delincuente arrepentido’, diferente de la figura que usan en Estados Unidos de ‘Testigo protegido’… ya que él sí participó en el delito de delincuencia organizada.
Por tanto, si los delitos vinculados con Odebrecht ya prescribieron, ¿Qué caso tiene que Lozoya hable y presente pruebas viejas de un caso por el cual no se podrá llevar a juicio y menos a la cárcel a todos aquellos que él embarre y pruebe que participaron en esos delitos de delincuencia organizada?
El quid del asunto es que a la 4T no le interesa llevar a la cárcel a todos aquellos que Lozoya pruebe que delinquieron en contra de las elecciones democráticas y contra la nación y sus recursos no renovables, sino demostrar que efectivamente Peña Nieto ganó la Presidencia con dinero ilícito y que otros tantos legisladores federarles y hoy gobernadores y políticos prominentes cometieron actos de corrupción y traicionaron al país y sus juramentos constitucionales.
La 4T, lo ha dicho el Presidente López Obrador, quiere estigmatizar la corrupción para que la sociedad sepa que no es bueno ni da prestigio social ser corrupto ni robar del dinero de la nación y si acaso viene, con lo declarado por Lozoya, armar por ahí uno que otro juicio político en contra de alguno de los peces gordos que hoy solo de supuestos se han mencionado.
La política está llena de sorpresas y también de trucos, así que de lo declarado por Lozoya solo se sabrá lo que a la 4T le convenga, puesto que en la jauría de presuntos delincuentes de cuello blanco podrían estar también algunos que hoy llegaron al poder junto con AMLO y bajo el amparo de Morena, como lo podrían ser el gobernador de Puebla que en los tiempos en que fue aprobada al Reforma Energética ocupaba escaño en el Congreso. Pero, júrelo usted, que los sí involucrados serán los encargados de filtrar por aquí y por allá su participación en los ilícitos que hoy se persiguen.
Por lo pronto han salido a relucir nombres que aún el día de hoy presumen haber dado lo mejor de ellos por México, que votaron por la Reforma Energética y sostienen que de ser posible lo volverían a hacer. Así, los deslindes no se hicieron esperar por todas partes del país negando haber recibido dinero de Peña Nieto y menos de Odebrecht. Así lo hicieron este viernes el ‘Chico Maravilla’ Ricardo Anaya Cortés y Ernesto Cordero Arroyo del PAN; los gobernadores de Querétaro y Tamaulipas Francisco Domínguez y Francisco García Cabeza de Vaca, respectivamente.
Pero lo peor no ha salido a relucir como parte de las declaraciones ministeriales que se asientan en las carpetas de investigación de la FGR, pero eso sí, cuando se empiecen a conocer habrá terremotos políticos muy fuertes y se ponga en tinta y papel lo que ya reveló Lozoya en España y que este viernes 24 de julio publicó en una edición especial el Portal Código Magenta.
Lo anterior fue dado a conocer y destacado ampliamente el mismo día por el periodista y columnista del Heraldo de México y conductor del Programa “Los Periodistas”, Álvaro Delgado Gómez, quien escribió en su Cuenta de Twitter “Ya cantó Emilio Lozoya: Los sobornos de Odebrecht fueron a la campaña de Peña Nieto @EPN y para el Pacto por México. Involucran también a @FelipeCalderón, @RicardoAnayaC, , @José Antonio MeadeK, @ErnestoCordero y concuño de Carlos Salinas, entre muchos otros”.
Lo anterior como referencia a lo que habló Lozoya en España y que Código Magenta revela como el contenido de esas declaraciones preliminares en donde pone al descubierto nombres de personajes prominentes cifras detalladas, modus operandi y lugares donde se entregaron los famosos sobornos, los de Odebrecht y los que salieron de Pemex, para aceitar la reforma energética. Ahí aparecen presuntos implicados como Ricardo Anaya, José Antonio Meade y José Antonio González Anaya y en medio de todo, el nombre de un enlace clave: Fabiola Tapia Vargas.
En resumen, como dijo María Félix en la película ‘Juana Gallo’ cuando ella y sus revolucionarios estaban sitiados por el ejército y se habían quedado sin balas: ¡Échenles a esos jijos mentadas de madre, que también duelen!
Lo dicho, la 4T y Lozoya han abierto la puerta de la Caja de Pandora, ¿A ver quién la cierra?
@frlicona
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