En Veracruz, se ha dicho hasta la saciedad, incluso de parte del propio Cuitláhuac, que son siete los Carteles que tienen presencia en la entidad, particularmente el “Jalisco Nueva Generación” que tomó carta de naturalización en estas tierras en 2010.
Se sabe además de la presencia de los “Zetas” y sus ligas con el gobierno a través de la Fiscal General del Estado, Verónica Hernández y para nadie es desconocido que el sur de la entidad es prácticamente de ellos.
¿Cuántas balaceras, ajusticiamientos y feminicidios se han sucedido en los últimos 26 meses, desde el arribo a Veracruz del gobierno de la Cuarta Transformación?
¿De cuántas masacres han dado cuenta los medios de comunicación en el norte, centro y sur de la entidad donde han ajusticiado hasta bebés con disparos en la cara como sucedió en la masacre del “Caballo Blanco”?
¿Por qué estamos en el segundo lugar en crímenes de odio que incluyen a alcaldesas, regidores y candidatos a regidores, ajusticiadas con el tiro de gracia, sin que Seguridad Pública mueva un dedo?
Son muchas y muy trágicas las historias de violencia y muerte como para que ahora resulte creíble el deslinde de Cuitláhuac García al llamar a denunciar vínculos criminales en el proceso de selección de candidatos.
En Veracruz si alguien tiene la información y el poder compartido con las organizaciones delincuenciales es el gobernador.
A poco ya se le olvidó aquel 30 de abril del 2019, el Día del Niño, en donde el propio Cuitláhuac confirma que miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación, recorrieron municipios de la zona del centro del estado repartiendo juguetes.
Acaso no hay memoria de que en Coatzacoalcos, donde la violencia del crimen organizado ha sido progresiva y se ha asentado, el grupo criminal de Los Zetas, periódicamente reparte despensas a los lugareños.
Imposible olvidar que los habitantes, gravemente afectados por la disputa entre el CJNG y Los Zetas, han recibido donativos por parte de los criminales, quienes frecuentemente entregan bolsas con productos básicos y una papeleta con la leyenda: “En apoyo a la ciudadanía de Coatzacoalcos. Del Sr. Comandante Z-45”.
Fueron decenas de camionetas las que arribaron hasta las localidades de la Cuenca del Papaloapan y al sur de Veracruz, donde integrantes de la célula criminal repartió cajas de despensas con el logo del CJNG a la población en el marco de la pandemia.
En un escueto y rústico comunicado, la organización criminal indicó que entregó ayuda en los municipios de Cosamaloapan, Carlos A. Carrillo, Tres Valles, Tierra Blanca, Córdoba, Orizaba, Tezonapan, Paso del Macho, Huatusco, Cuitláhuac, Yanga, Potrero Nuevo, Atoyac y Cardel, entre otros municipios.
Y en videos que subieron a redes sociales, se aprecia el momento en que las camionetas cargadas llegan a dichos puntos y comienzan a repartir las cajas con la etiqueta CJNG.
“Esto es en apoyo a la ciudadanía, aquí estamos sus amigos pa’ lo que se ofrezca”, expresa un joven con el rostro cubierto por una gorra y un cubrebocas. Es el “Grupo Sombra”, que también reparte despensas.
Según las autoridades federales, en Veracruz, tierra de los homicidios y desapariciones forzadas operan seis organizaciones delictivas, el CJNG, Los Zetas, Grupo Sombra, Sangre Nueva Zeta, Cártel del Siglo y Los Piña.
A ello hay que agregar que en Xalapa nuevos grupos delincuencias se han asentado, hoy con singular interés por participar en política y en las elecciones mismas.
¿Cuál es la finalidad de hacer públicos esos apoyos?
No hay duda que es para que en su momento -que es ahora- apuntalar a sus gallos en el proceso de selección de candidatos.
¿Aliados con quién?
Por supuesto que las organizaciones criminales no piensan en los partidos perdedores, ni en los segundos y terceros lugares en las preferencias ciudadanas. Piensan en quienes tienen la batuta. Piensas en el partido en el poder con el cual trabajan y seguirán haciéndolo.
Los Carteles no se alían a los perdedores sino a los que tienen poder.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo |