La operación política de Morena y su estructura de poder, estatal y federal, se está haciendo sentir por varios flancos.
El domingo pasado, verbigracia, la regidora priista de Minatitlán, Damara Isabel Gómez Morales, difundió por Facebook una fotografía en la que aparece sonriente en la oficina de la titular de la Secretaría de Energía (Sener), Rocío Nahle García, la más fuerte aspirante de Morena a la gubernatura de Veracruz.
La edil sureña del PRI publicó el siguiente mensaje que aquí reproducimos tal cual: “Muy agradecida con nuestra queridísima Ministra de Energía una gran mujer, preparada, con oficio político, sensibilidad con la ciudadanía y de excelentes resultados Rocío Nahle por esta grata reunión, con mucho compromiso para México, y para seguir engrandeciendo a Veracruz, es necesario que las mujeres y los hombres nos unamos para coadyuvar con los proyectos de nación. El compromiso con nuestro país nos debe de unir. (sic) Mujeres empoderando a mujeres! #dosbocas #reformaelectricaya”.
También ha trascendido que el secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos –quien al igual que el gobernador Cuitláhuac García y el líder del Congreso local, Gómez Cazarín– está plenamente comprometido con el proyecto sucesorio de Nahle, ha comenzado a buscar acercamientos con los pocos alcaldes electos de la oposición, entre ellos con el priista Juan Ignacio Morales Guevara, de Altotonga, muy allegado al ex senador Pepe Yunes Zorrilla, único candidato a diputado federal que ganó por el partido tricolor y quien es mencionado nuevamente para contender en 2024 por la gubernatura.
Bueno, hasta la Secretaría de Seguridad Pública detuvo el pasado viernes en Fortín de la Flores al priista Gustavo Díaz Sánchez, recién reelecto como diputado local por el distrito electoral número 1 de Oaxaca con cabecera en Acatlán de Pérez Figueroa, región del istmo que colinda con Veracruz en la Cuenca del Papaloapan.
PEPE YUNES CONTRA EL PEF 2022
Por cierto, el que se lució ayer en la sesión de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados fue el legislador veracruzano Pepe Yunes Zorrilla, quien se pronunció en contra del dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2022 que será debatido este miércoles por el pleno de la Cámara baja del Congreso de la Unión.
Y es que el diputado federal por el distrito de Coatepec hizo ver que no se están asignando recursos suficientes para apoyar al campo nacional y a sus productores, ni a la infraestructura carretera, ni a la vivienda popular, tampoco al sistema de salud ni a los menores de la primera infancia, que son fundamentales para abatir los rezagos y la desigualdad social.
Yunes Zorrilla citó el artículo 4° constitucional y señaló que “derecho social que no va a acompañado con su respaldo presupuestal no son sino buenas intenciones, palabras huecas, demagogia”.
“Queremos resolver la accesibilidad de los mexicanos en materia de derechos de salud, acompañémosle presupuestalmente. Y este aumento está considerando solamente en la coyuntura del momento la posibilidad de invertir en más vacunas, pero no en el abastecimiento del cuadro básico de medicinas, pero no en el equipamiento de hospitales, pero no en la posibilidad de acompañar el servicio de salud como derecho humano universal”, expuso.
Resaltó que “la vivienda no tiene un solo peso, y forma parte de nuestra obligación por mandato constitucional”. Además apuntó que tampoco “hay un solo recurso para poder hacer valer el derecho universal de nuestros niños que puedan tener como obligación estatal la preescolaridad. No hay un solo peso que vaya en su avance”, resaltó.
Al finalizar su participación, el ex senador y ex candidato a gobernador de Veracruz propuso adelantar una reserva, para la cual pidió el apoyo de los demás integrantes de esta comisión legislativa.
Dicha reserva, dijo, “tiene que ver con el gasto de operación que están circunscritos en el anexo 25 del decreto del presupuesto”. E hizo la siguiente puntualización: “Nosotros vamos a votar aquí, por poner un solo ejemplo, por darle 238 mil millones de pesos al programa de pensión de los adultos mayores de Bienestar. Todos, aquí, queremos que esos 238 mil millones de pesos lleguen a nuestros adultos mayores. ¿Pero qué va a pasar? Nosotros vamos votar esa cantidad y esa bolsa, y posteriormente la Secretaría que la va a ejecutar, que es la de Bienestar, tiene que presentar las reglas de operación, y las reglas de operación –por lo menos las que están vigentes–, prevén que el 3.61 por ciento se utilice para gastos de operación. El 3.61 por ciento de 240 mil millones de pesos son 8 mil 500 millones de pesos que va a tener la Secretaría de Bienestar para operar un programa, cuando el programa no se expande de más, cuando la naturaleza de la propuesta es que ese programa aumente el monto del beneficio más que la base de quienes los que van a recibir, aun cuando se amplía hasta 70 años”.
Pepe Yunes propuso considerar una reserva para un artículo transitorio en el decreto del PEF 2022 “en el sentido de que los gastos de operación para los programas sociales que están inscritos en el anexo 25 de este decreto puedan estar sujetos a dos condiciones: a lo que se utilizaba en su operación en el 2018 o a lo que se ejerció en este año, y que más recursos –y yo sé que eso es parte de la propuesta y de la buena fe de toda esta representación– se conviertan en subsidios, en beneficios para más personas, más dinero. Ocho mil millones de pesos para beneficiar a más adultos mayores y no 8 mil millones de pesos para que queden en los gastos de operación de un programa noble”.
“No hacerlo invitaría mucho a suspicacias”, concluyó. |