Reseñan las crónicas del encuentro que luego de “1 año 3 meses de que tomé protesta como presidente municipal Altotonga es otro. Hoy el municipio ha cambiado y hemos tenido la gran oportunidad de seguir escalando para atender las demandas de la población”.
El edil de Altotonga, Ignacio Morales Guevara -el único presidente municipal del estado de Veracruz que ganó la pasada elección sin formar parte de ninguna alianza partidista- comentó los problemas y la manera en que se han ido enfrentando.
“Únicamente he sido priista; no he militado en ningún otro partido. Mi familia también siempre lo ha sido. Yo no salgo por la alianza, salgo por el PRI y pertenezco al municipio, en número de habitantes, más grande que tiene el PRI mismo que en las intermedias ganó Orizaba, Cosoleacaque y Perote, pero por la alianza PRI PAN PRD”.
“A mí me toca contender con 14 candidatos, 5 expresidentes municipales. Fue una contienda en la cual, en un hecho histórico, votaron casi 30,000 personas”.
Altotonga ya mismo bajo el mandato de Nacho Morales, cuenta con 5 regidores todos de diferentes partidos, “tengo del Verde Ecologista del extinto Cardenista de Morena y del PAN, un regidor priista, que me tocaba por haber ganado la elección, y la sindica, también priista”.
Ignacio Morales, Nacho como es popularmente conocido, destaca que tras la toma de posesión se encontró con un municipio totalmente colapsado.
“Una policía intervenida por Seguridad Pública, porque hace 3 años al anterior alcalde le descubrieron que su comandante estaba coludido con gente del crimen; mientras en el tema social se carecía de atención escudándose en que no podía atender a la ciudadanía por la pandemia, lo cual provocó que más de 10,000 trabajadores de la maquila se fueran al desempleo”.
Altotonga vivió literalmente un problema de hambruna. No había servicios básicos como la recolección de basura y otros elementales.
Por ello, en buena parte de las 109 comunidades, la gente se empezó a salir “empezó a migrar a Estados Unidos dejando como consecuencia la destrucción de la familia. Muchos ya no regresaron, de ahí la urgencia de regresar a la maquila, a las oportunidades de empleo para reactivar la economía”.
“Mi padre fue presidente municipal del 2008 al 2010, en ese entonces teníamos 14 colonias. Hoy son 54. Ello provocó la construcción de una nueva red de abasto de agua potable, drenaje, alcantarillado, alumbrado”.
“Pero, salimos adelante”.
El año pasado se reactivó completamente el tema de obra pública con más de 150 obras que se realizaron en el primer año y no hemos dejado de pagar la deuda con Banobras “de responsabilidad nuestra”.
“Así, continúa el edil en el encuentro con los periodistas, las 0:00 del primer día de mi gestión, llegaron tres camiones de basura para poder darle mantenimiento a todo el municipio que de la noche a la mañana se embelleció”.
“Se hicieron murales. Se reactivó una Casa de Cultura, que no tenía ni beneficio. Se atacaron, sobre todo en infraestructura, calles olvidadas -a dos cuadras del parque dejaron un socavón donde se fueron 2 carros- y el Palacio Municipal que me lo entregaron totalmente destrozado, fue restaurado”.
Hoy las cosas en Altotonga se ven diferentes.
“Volvimos a reactivar el ayuntamiento y a reactivar la economía. En Altotonga hemos regresado la confianza a la ciudadanía que ve un municipio limpio, comprometido y pujante”, dice el edil.
“Yo siempre digo que la política es de puentes y de diálogo y aún mi origen partidista no tenía que ser mayor para poder buscar el bienestar de la ciudadanía, yo siempre he dicho que estar de acuerdo entre los 3 órdenes de gobierno es lo que provoca que exista una mejor calidad de vida para el ciudadano”.
Es el relato de un joven alcalde que no se confronta con la autoridad estatal; que tiene vocación política y compromiso con el futuro.
Hoy Altotonga vive tiempos diferentes.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo |